Esta Liga se parece cada vez más a esos documentales de naturaleza en los que la hambruna lleva a habituales cazadores a ser cazados. Porque Atlético y Sevilla, depredadores muy habituales en la pasada década, padecen este curso tal sequía de goles, son tantos los problemas que tienen para hincarle el diente a las defensas cerradas, que sus débiles colmillos los están convirtiendo en víctimas propiciatorias. El abanico por las dos cotizadísimas plazas de Liga de Campeones que dejan vacantes Barça y Real Madrid cada año se está abriendo y son hasta seis los equipos que hoy pueden soñar con fundadas esperanzas con jugar entre las estrellas la próxima temporada.

Carísima Europa. Fuente: Elaboración propia.

El Atlético también se ha reservado plaza de Champions las últimas ocho temporadas, pero en esta campaña, las sensaciones son distintas. Y lo refleja la Liga: hoy, los colchoneros son sextos. Y dejando a un lado esa primera media campaña de la 2011-12, en la que Diego Simeone asumió los mandos en diciembre, el Atlético de Simeone siempre ha transitado la segunda vuelta en zona Champions.

La sola posibilidad de que la próxima temporada no suene el himno de la Champions en el Metropolitano estremece a cualquier seguidor rojiblanco. La Liga de Campeones se ha convertido en los últimos años en un elemento principal del cuadro de ingresos del Atlético, que en sus últimas seis participaciones ha obtenido al menos 341 millones de euros por esta vía. Y en unos milloncejos más, 349, se fija el presupuesto para esta campaña, después de haberse gastado 126 millones de euros en un solo jugador, Joao Félix, que ni de lejos está justificando el mayúsculo esfuerzo en su contratación.

Pero no es sólo el por ahora fallido ensamblaje de Joao Félix lo que ha gripado al Atlético de Simeone, que ha funcionado hasta esta campaña como uno de esos motores Mercedes que duran décadas y décadas. El luso porta la llave para solucionar el vacío de Griezmann, porque el dineral de uno se ha ido por el otro. Y no tanto por los goles, que deben recaer más en Morata o Diego Costa, como por la capacidad para desnivelar en ataque, como hacía el francés.

Falta muchísimo gol en este Atleti. Tanto, que va a tanto por encuentro: 22 en 22. Una cosecha propia de un aspirante a la permanencia.

También la marcha de Godín, por encima de los demás, y de Lucas Hernández, Juanfran o Filipe Luis han minado una barbaridad la capacidad competitiva.

Con todo, el Atlético ha morado en plaza de Champions en 13 de las 22 jornadas de esta Liga. Y otro asiduo incluso a la tercera plaza y que se postulaba incluso a algo más hace unas semanas, el Sevilla, también se está encallando por su falta de gol.

Lleva 28 tantos, otro registro indigno de un aspirante a Champions. Julen Lopetegui lo teje todo en torno a la fiabilidad defensiva que da la seguridad en el pase. Y el equipo apenas asume riesgos. Fuera de casa, su solidez le da para aprovechar alguna ocasión y llevarse los tres puntos, como en Granada, Vitoria, Valladolid o Mallorca, pero en casa la historia cambia. Todo es previsible y fácil de frenar. Sin juego en la mediapunta, una banda izquierda caótica y un solo rematador, De Jong, al que le cuesta estar en el sitio además, es fácil defenderle en estático el ala derecha que integran Ocampos y Jesús Navas.

La figura de la jornada. Fuente: elaboración propia.

Las dudas de uno y otro han abierto la puerta al Getafe –tercero con los mismos 39 puntos que el Sevilla– y también a un Valencia a más (37, uno más que el Atlético), R. Sociedad (34), Villarreal (34) y Athletic (31). Muchos depredadores que enseñan los dientes y tienen apetito de estrellas.