Carlos Bacca, tras la salida de Rakitic, es el valor de mercado que cotiza más al alza del actual Sevilla. El futbolista, pese a su esasísimo protagonismo en el Mundial, debido a la dura competencia que ha tenido en la selección colombiana y, sobre todo, a una contractura muscular que lo tuvo apartado en la primera fase del torneo, sólo jugó el partido decisivo de cuartos ante Brasil. Y fue clave para el amago de reacción cafetera. Saliendo del banquillo, provocó el penalti que marcó James Rodríguez y le dio mucho empuje al arreón final colombiano. Eso y el interés del Newcastle en contratarlo, desvelado por la prensa inglesa, ha llenado de relativa inquietud al sevillismo sobre su futuro.

Sin embargo, el futbolista envió este martes desde su ciudad natal un mensaje tranquilizador. En Puerto Colombia fue recibido por muchísimos hinchas que lo tienen por un héroe, pese a la eliminación de Colombia. Y el futbolista se expresó así cuando fue preguntado por ese interés del Newcastle. "Ahora mismo mi mente está puesta en descansar, en disfrutar este momento con mi familia, con la gente que me ha visto crecer. Luego me integraré al Sevilla, con las mismas ganas y los mismos deseos de lograr cosas importantes en ese lindo club", dijo Bacca, muy cariñoso con la entidad de Nervión.

Bacca se ha integrado perfectamente en la ciudad y en el club en el que se destapado para la élite mundial. Pese a que ya apuntaba una magnífica proyección, el título conseguido con el Sevilla y sus goles en la Liga lo han catapultado. La incertidumbre es lógica, pero su mensaje tranquiliza.