La confianza en un técnico suele ser el primer punto de partida para la construcción de un proyecto fiable. El Getafe lo decidió así. Con todas las armas en poder de Luis García, hizo primar una filosofía sobre la premisa de fabricar un bloque lleno de nombres.

Tras unas campañas llenas de irregularidad y objetivos inciertos, la mirada del Getafe se dirige hacia Europa, escenario en el que puede exponer sus intenciones y dar por válido un proyecto que quizás no cuente con los cimientos futbolísticos suficientes para convertirse en realidad.

Ni llegaron grandes nombres en el pasado mercado veraniego ni otros dieron el salto que se espera de ellos. La escasa solvencia de sus delanteros es el punto débil de un equipo sin dinamita arriba. Miku marcó dos goles antes de irse y Álvaro Vázquez siguió su camino. El resultado de ello es que Pedro León es el máximo goleador de un equipo que aún esperar con inquietud el salto de calidad de Adrián Colunga.

sin balón

Los repliegues del Getafe logran su objetivo y obligan al rival a utilizar mucho las bandas. El cuadro de Luis García se siente cómodo con espacios por delante, a sabiendas de que su potencial permite salidas rápidas para hacer daño al adversario.

Moyà es la mejor noticia para la portería, al recuperar el nivel de juego que lo convirtió en uno de los mejores porteros jóvenes del país. Alexis se consolidó como central fuerte mientras que Rafa y Lisandro asumen roles más dinámicos.

Arroyo suple a Valera en el carril diestro con polivalencia, mientras que Roberto Lago se atreve con subidas controladas por el zurdo. Lacen es el encargado de equilibrar todo el juego desde la medular, aunque cuando la comparte con Míchel las tareas son más repartidas.

con balón

Mucha verticalidad en el juego del equipo de Luis García. El toque se convierte en profundidad cuando el balón llega a los medios ofensivos. Mosquera está creciendo con minutos que reflejan su buen hacer con el balón, mientras que Juan Rodríguez es una opción menos creativa para esa zona media.

Por delante, Luis García posee futbolistas de talento capaces de marcar diferencias, aunque también propensos a desaparecer durante muchos minutos en su labor de trabajo táctico. Pedro León es un fijo por la derecha y es capaz de desequilibrar y crear peligro con sus lanzamiento lejanos y a balón parado. Sarabia suele jugar por detrás del punta, siendo clave en la ejecución del último pase. Diego Castro es la otra gran alternativa en tareas de construcción, aunque su poder de llegada al área también es decisivo para su equipo.

En ataque, más carencias de puntos fuertes. Adrián Colunga no termina de encontrar su sitio y sólo brilla cuando los espacios están muy presentes. Marica llegó como arma goleadora, pero tampoco se adapta con facilidad al juego del Getafe. ¿Quizás el mercado invernal invite a corregir algunas variantes?

lo mejor

La calidad de su línea de tres cuartos, capaz de desequilibrar la defensa adversaria.

lo peor

El Getafe no refleja indicios de intensidad en todos sus duelos, y sin ella queda muy expuesto.