Una cosa son las pulsiones viscerales ante el presunto trato discriminatorio al Sevilla por parte de la LFP, y otra muy distinta la realidad de la política de los grandes salones del fútbol nacional. Entre esos dos frentes tiene que moverse José Castro en estos momentos, midiendo muy bien sus palabras para no herir sensibilidades en ninguno de los dos frentes. El presidente del Sevilla está en la tesitura de escuchar a su afición y de no abandonar el pragmatismo. Evidentemente, sin saber quién va a ser escogido en las próximas elecciones a la presidencia de la LFP, posicionarse públicamente iría contra la inteligencia política. Se puede decir que Nicolás Maquiavelo se retorcería en su tumba si Castro fuera tan vehemente como su hinchada contra Javier Tebas. Y ahí anda el rector sevillista, entre la gratitud a su gente y el realismo.

El dirigente blanquirrojo realizó este lunes un amplio repaso a la actualidad del club y del fútbol nacional. Y lo primero que hizo fue volcarse con su afición. "Quiero dejar claro mi agradecimiento a la afición, que está aguantando, casi ni respirando con la calor que hace a las cuatro de la tarde, que está apoyando al equipo y está viniendo al estadio asiduamente", dijo en referencia al último partido ante el Alavés. "A partir de este parón las temperaturas bajarán y los horarios tendrán que ir cambiando de forma y manera que no tengamos que sufrir más esta cuestión. Casi todos los equipos están jugando a horas que no son las idóneas, pero la realidad es que nuestra afición, una vez más, ha demostrado y ha dado a conocer a todo el mundo el cariño que le tiene a sus colores y a su club, y está ahí apoyando y animando, sosteniendo a su equipo en esos momentos de calor", dijo enfático Castro. "Jugar con 30 grados es una barbaridad, imagínense a cuántos grados se pondrán los jugadores que están haciendo un esfuerzo físico en el campo. Por tanto, reitero nuestro agradecimiento a la afición", añadió.

No se quedaron ahí los halagos a su gente y los tiritos a la LFP. "Nuestro estadio es muy difícil para los demás y se crea un ambiente sin igual en los partidos. Eso no sólo lo digo yo como presidente, sino que se habla en toda España". Luego llega la hora de la política.

El presidente del Sevilla es permeable al clima de protesta contra Tebas. Pero va con pies de plomo en este asunto. "Antes del partido del Alavés hubo una concentración de sevillistas pidiendo que no se votara a Tebas. Todo el mundo tiene derecho a dar su opinión mientras sea educadamente. La realidad es que nosotros aún no hemos avalado a Tebas ni a nadie, pero de momento sólo hay un candidato. Hay otra propuesta de Álex Aranzabal y veremos. El sevillista tiene que quedarse tranquilo porque, cuando llegue el momento, votaremos lo que consideremos oportuno, pero aún no han sido las votaciones", dijo.

Dejando a un margen el asunto de la LFP, Castro terció hacia la actualidad deportiva y hacia la gestión. "Se nota la confianza porque la afición es consciente de cómo funciona el Sevilla. Si no fuera así -arguyó en referencia a la política de ventas-, quizás no tendríamos posibilidad de mantener las nóminas de los futbolistas. Para tener jugadores buenos hay que pagarlos y hemos hallado esta fórmula para que los jugadores den fruto en nuestra entidad y se puedan conseguir títulos. Ojalá sigamos así, pero es difícil. Tenemos que valorar lo que hemos hecho y ser realistas", explicó, y recordó que el Sevilla ha mantenido a N'Zonzi, Vitolo e Iborra, "futbolistas de primera línea".

Eso sí, se mostró deseoso de ver a un Sevilla cada vez mejor. "No me extraña la situación del equipo, hay plantilla para sumar más puntos y queremos seguir mejorando. La Liga es muy competitiva y estamos a un punto de los dos primeros. Es un proyecto nuevo, con muchas caras nuevas y quizás más fichajes de la cuenta por circunstancias, y está arriba. Siempre cuesta adaptarse, que cojan la forma necesaria y adecuarse a la ciudad y a muchas cosas. Queremos que rindan cada vez más y mejor". Igualmente, mostró su anhelo de crecer como un equipo de Champions: "En Europa ya nos toca dar un pasito más porque no queremos estar en la Liga de Campeones de vez en cuando. Estar cada año es nuestra ilusión y el esfuerzo económico para ello es el más grande de la historia. Firmamos jugadores y subimos el presupuesto para subir los objetivos".