Olvidado, más le vale, el palo de la derrota en Zaragoza, el Coosur Betis cierra la primera vuelta de la Liga Endesa recibiendo en San Pablo a uno de los equipos de moda de la competición, el Burgos (18:00), que con el billete para la Copa en el bolsillo pelea incluso por ser cabeza de serie en el torneo que se celebrará en Madrid en febrero. Pero si el conjunto castellano-leonés busca un ambicioso reto no lo es menos el objetivo del cuadro sevillano, que trata de confirmar su reacción y salir de la zona baja logrando un triunfo que supondría un importante impulso.

Pudo caer la tercera victoria en la capital maña, pero en la prórroga, tras el regalo de Kay desde la línea de personal, otra vez, la apuesta por el ataque y no por la defensa y el poco celo del trío de colegiados (ninguno de los tres pita esta jornada) para señalar una clara falta sobre Ouattara evitó que el equipo hispalense sumara la tercera victoria seguida. Eso sí, deben cambiar los de Joan Plaza su inercia en los partidos, porque no siempre podrán soportar el intercambio de golpes de las últimas citas y menos quizás ante el conjunto más anotador de la temporada, con un promedio de 87,7 por partido.

El potencial de la plantilla de Joan Peñarroya es tremendo y ahora encadena cuatro triunfos seguidos sumando más de 90 puntos por cita. Sólo cinco derrotas acumula en lo que va de curso, las últimas tres sin llegar a los 80 puntos. Será el reto del plantel bético, que debe remangarse de nuevo para mostrar esa mejora atrás que se vio en los primeros encuentros y que ha tornado las últimas jornadas por una apuesta anotadora que el mismo técnico reconoce que su equipo no tiene.

Ninguno de los tres árbitros que pitaron en Zaragoza repiten esta jornada

El entrenador verdiblanco deberá hacer de nuevo un descarte. Niang sigue un trabajo específico para recuperarse de las molestias y no estará disponible. Aun así alguien deberá quedarse fuera y tras no aprovechar la oportunidad en Zaragoza Obi cuenta con todas las papeletas para ello. Deberá echar una mano Pablo Almazán a Kay ante Horton y Rivero, dos cuatros muy físicos, pero ello permitirá que entre Borg para poner un punto más de intensidad en la defensa sobre los Benite, McFadden, Barrera o Rabaseda, algo que se echó de menos con Ennis en Zaragoza.

Pero el motor de este Burgos está en la dirección, con Cook y Renfroe moviendo al equipo y asistiendo a sus compañeros. Casi 20 asistencias de media acumula el cuadro burgalés, por lo que a Campbell y Randle se les debe exigir un punto más de esfuerzo y que entiendan de una vez lo que penaliza pasar los bloqueos por detrás. Y eso que ambos le están dando un mayor dinamismo al Betis, mucho más vertical y veloz en sus transiciones, pero los dos sufren atrás, aunque esta vez sus pares no les sacarán demasiada ventaja en cuanto a centímetros.

Pero es mucho más este Burgos, que anda en la quinta posición y pelea por acabar la primera vuelta cuarto. Por dentro Kravic tratará de imponer su envergadura y capacidad para generarse canastas a un Ndoye que necesita que lo surtan de muchos más balones, mientras que Sakho pone la fuerza en la pintura. Jerome Jordan deberá activarse de una vez, porque, aunque suma cosas, no supone todavía un cambio diferencial por dentro. Por fuera, la capacidad triplista del equipo la evidencian los McFadden, Benite, Barrera o Rabaseda, además de los bases. Ante tal potencial, todo pasa por la defensa, una vez más, porque Feldeine, pese a sus 32 puntos en Zaragoza, no se está mostrando como un anotador regular.

El fuerte bético es el colectivo. Un grupo que cuando defiende como equipo ha demostrado ser capaz de secar al rival, pese a que debe hacerlo durante más minutos, especialmente ante un equipo tan anotador como el Burgos, con el que posiblemente no valdrá la idea de intentar anotar una canasta más. El cara a cara entre dos de los equipos que más balones recuperan generará chispas, así como medir a uno de los que más faltas reciben (el Betis, con 21) ante uno de los que más personales comete (Burgos, con 21,6).

Entre Cook y Renfroe suman más de 10 asistencias de media, del total de 20 de su equipo

Con el conjunto leonés llegará un jugador formado en Sevilla durante varios años como Salash. El bielorruso llegó a debutar con el equipo hispalense en la ACB en la 2014-15. Un cupo de formación que al Betis le hubiera venido muy bien en estos momentos para completar una rotación que cojea precisamente en el puesto de ala-pívot y que hace que Plaza tenga que mover sus fichas descompensando otras posiciones.

Aun así, el Coosur Betis necesita un triunfo que le permita acabar la primera vuelta fuera de los puestos de descenso y, sobre todo, que no apague esa sensación de mejora de un grupo que cree en sus opciones, aunque sea a golpe de canasta y no de briega defensiva, el mantra de un Plaza que sigue tratando de inculcar a sus jugadores, aunque las victorias, de momento, llegan con la anotación. Burgos será una dura prueba.