"Si no creyese en la salvación no estaría aquí; yo soy un ganador"

Lleva pocos días en las filas del Betis, pero sus brillantes primeros minutos en el césped le otorgaron desde el primer día un rol protagonista en un equipo necesitado de líderes. Acude a cada entrenamiento desde su casa de Sanlúcar la Mayor disfrutando de cada minuto y aprendiendo palabra a palabra un idioma nuevo. Reconoce el brillo de la ciudad y sueña con un futuro perfecto. Pero, para ello, sabe que la salvación es el primer paso hacia una nueva aventura en su carrera. Alfred N'Diaye (6-4-1990, París) quiere dar el salto definitivo en su progresión logrando con el equipo verdiblanco la proeza de una salvación a la que pretende agarrarse hasta el último día.

-Tenía varios pretendientes este invierno tras su mala experiencia en el fútbol turco, ¿por qué eligió el Betis?

-Podría haber venido el pasado verano, pero no se hizo. En ese momento dejé en mi cabeza la opción de llegar al Betis y en enero volvieron a proponerme venir. Sabía que era un buen club, uno de los mejores de España pese a la mala situación actual, y quería jugar en una liga competitiva como la española. Era una buena oportunidad para mí.

-El descenso está cada jornada más cerca de condenar al Betis a una temporada para el olvido. ¿Llega con la creencia de que un milagro aún es posible?

-Podemos salvarnos, si no no hubiese venido. Yo no juego para descender. En mi cabeza la primera misión es conseguir un buen resultado ante el Granada, que es un adversario directo para ese objetivo.

-Su alianza con el público es inmejorable. Viene de unos torneos ligueros en los que el ambiente es fuerte y ahora el estadio bético alaba su intención de ayudar a conseguir el objetivo.

-Los aficionados me han sorprendido. No sabía que en España había aficiones así. Es un público muy caliente, eso me gusta, me recuerda a Inglaterra y Turquía. Es importante para un jugador, ayuda a ser mejor. Cuando recibimos apoyo, tratamos de dar el máximo rendimiento posible sobre el terreno de juego.

-Y en junio tocará volver a empezar. El Sunderland es su propietario y quizás una experiencia positiva aquí cambie sus planes de futuro.

-No puedo saber nada aún sobre mi futuro tras el mes de junio. Debemos esperar al Sunderland, con el que tengo contrato. No sé si podré quedarme o no, por el instante sé que estoy aquí cuatro meses y lo daré todo por mantener al Betis en Primera.

-Su adaptación parece rápida. Sin embargo, son muchos los que piensan que quizás haga falta más movilidad para destacar en una liga como la española, con tanta velocidad.

-Es un campeonato diferente a los otros en los que he jugado. En Inglaterra y Turquía el fútbol es mucho más físico que aquí, mientras que en Francia es más táctico. Aquí hay un fútbol más técnico y aprendo de ello. Es bueno venir aquí y adaptarme al juego.

-Debutó como central. Jugó en el mediocampo en su segundo partido. Ahora parece que Calderón analiza la opción de volver a situarlo en el centro de la zaga. ¿Dónde se siente mejor?

-Hacía tiempo que no jugaba en defensa, lo hacía en la medular. Pero yo no estoy aquí para reivindicar un puesto concreto, si el técnico piensa que debo jugar abajo, lo haré, si cree que es mejor en el centro del campo también me adaptaré. Puedo jugar en ambas posiciones y lo haré donde sea mejor para el equipo.

-¿Qué variaciones cree que deben producirse para tratar de dar un salto de mejoría?

-No conozco al equipo lo suficiente para saber cuáles son las necesidades mayores aún. Sé que debemos encajar menos goles para tener resultados. Recibir un 5-0 no es viable para salvarse.

-Los sistemas tácticos cambian en la medida en que Calderón busca variantes de cara a afianzar los puntos fuertes del equipo. Y ante el Espanyol se logró la victoria...

-Respecto a la situación que atravesamos, creo que con cinco defensas nos sentimos más sólidos y optamos a encajar menos goles. Pienso que lo importante es ser fuertes abajo, arriba tenemos jugadores de calidad que pueden marcar goles. Por lo tanto, la misión es tratar de no encajar tantos goles, ya que si lo hacemos, no podremos ganar partidos.

-Algunos comienzan a considerarlo un líder en el equipo.

-No sé si puedo ser un líder en el campo. Sé que doy el cien por cien en cada partido. Y no soy un perdedor, sino un ganador. Doy lo máximo en cada partido, y con ello se consiguen resultados.

-Todo medio centro, más aún contando con su polivalencia futbolística, tiene un referente. ¿Cuál es el suyo?

-Siempre he tenido a Patrick Vieira como gran referencia en mi posición. Actualmente admiro a Yaya Toure; pienso que son los mejores medios del mundo.

-Sus inicios en el Nancy no fueron fáciles. El fútbol cambió desde entonces, pero ¿qué supuso para su carrera deportiva el haber sufrido en sus primeros pasos en este deporte?

-Cuando era más joven, el centro de formación estaba lejos de la ciudad. Tenía que coger el autobús cada mañana y era duro. Pero me forjó mentalmente y me ayudó a ser más fuerte, a luchar por las cosas y a progresar desde el trabajo.

-Nació en París, pero tras jugar en los equipos inferiores del combinado galo decidió decantarse por Senegal.

-Jugué en todas las categorías inferiores de la selección francesa. Después de ello, tenía que decidir entre Francia y Senegal para ser internacional. Tuve una proposición de Senegal, que es el país de origen de mis padres, y acepté. Pensé que era la elección correcta y no me arrepiento de ello.

-Su llegada parece solventar algunas de las carencias de este Betis. Matilla, Nono, Salva Sevilla, Verdú... responden a un mismo patrón de juego. En su caso, se trata de una pieza especial, quizás necesaria.

-Hay muchos medios de toque, de manejo del balón. Yo soy un perfil diferente, más físico y de menos toque. En el fútbol hace falta todo tipo de jugadores. Un equipo necesita jugadores técnicos y jugadores más físicos.

-Tras algunos periodos irregulares en su carrera, le llega una inmejorable oportunidad para inscribir su nombre en el fútbol europeo y resurgir de unas experiencias que no fueron tan brillantes como se esperaba.

-Mi objetivo es ser el mejor jugador posible. Si consigo mi mejor nivel, cuando lo haces, consigues hacerte notar y que todos estén pendientes de ti. Siempre miro hacia la mejora constante y para ello debo luchar aquí.

-Pronto conocerá el derbi de la ciudad. El choque contra el Sevilla marca en ocasiones una temporada, ¿qué informaciones tiene al respecto?

-Me han hablado del derbi con el Sevilla. Y sinceramente estoy ansioso por jugarlo, me gustan mucho esos partidos. En Inglaterra y Turquía los he vivido y siempre me gustó competir en esas circunstancias. El ambiente será extraordinario y quiero vivirlo.

-La Liga Europa es una realidad olvidada. La próxima semana el Betis retorna a la competición y las miras están puestas en si es conveniente poner todos los sentidos en esos choques o centrarse únicamente en el torneo liguero.

-Es bueno jugar en Europa. Lo más importante es mantenerse en Primera. No hay color, la prioridad, si se debe elegir, es la permanencia en la Liga. Pero si podemos hacer un buen torneo en la Liga Europa, será positivo. La jugaremos dando todo lo que tenemos en cada encuentro.

-¿Qué puede esperar la afición bética de N'Diaye? ¿Queda por ver la mejor versión de un futbolista que ya ha mejorado algunas carencias existentes?

-En defensa mostré mis cualidades ante el Espanyol. Ante el Valencia no enseñé mi mejor nivel en el centro del campo. Cuando juego como medio, sé que puedo dar mucho más que en ese partido. De cualquier forma, sea en la posición que sea, trataré de mejorar siempre.

-La afición es exigente y ya lo sabe. ¿Esa presión añadida puede condicionar de alguna manera a un bloque de futbolistas que deben demostrar su valía?

-Somos jugadores de fútbol, la presión no debe someternos a nada. Hay que pasar por encima de la presión para poder ganar partidos.