Otro embrollo judicial

El juzgado de instrucción número 15 de Sevilla admitió este lunes a trámite la demanda contra los administradores concursales del Betis -Francisco Tato, Gerardo Narbona y Antonio Jesús González- y contra el anterior administrador judicial, José Antonio Bosch, presentada por dos exempleados de la entidad verdiblanca.

De esta forma, el juzgado tendrá que decidir sobre una demanda en la que se apuntan cuatro delitos. En primer lugar se habla de un presunto delito societario, atendiendo tanto a la condonación de dinero a Sogecable en el contrato televisivo como por los trabajos de Gesalus en los que se produjo una supuesta deslealtad del administrador judicial; además, se apunta una estafa procesal, al realizarse una serie de informes para confundir al juez; en tercer lugar se añade un posible delito contra la Hacienda Pública, después de que dos de los concursales, Narbona y González, dejasen de declarar 120.000 euros, al mismo tiempo que éste último se desgravó una factura de un cátering supuestamente ofrecido al club y valorado en 485.000 euros; por último, se señala un presunto falso testimonio pericial, al entenderse que el informe en el que se declara culpable el concurso no es objetivo y sí se vierten demasiadas opiniones.

El juzgado, a la vista del informe del Ministerio Fiscal sobre este asunto, procedió a la admisión de la querella, que se puso en conocimiento de las partes, previniéndolas que contra el mismo podrán interponer, ante este mismo juzgado, recurso de reforma en el plazo de tres días y subsidiariamente con el anterior o por separado recurso de apelación en el plazo de cinco días.