Desde diversos sectores del sevillismo se venía reclamando la paz social en el estadio y ésta podrá tener efecto mañana. La vuelta de las semifinales de la Copa del Rey ante el Atlético han dinamizado los encuentros entre las partes y todo hace indicar que el encuentro ante el Deportivo de la Coruña será el reinicio de la normalidad. José María del Nido no quiso anunciarlo ayer, ya que hoy hay reunión del consejo de administración y será éste el que decida si se revocan las medidas de control en Gol Norte tal y como estaba reclamando el principal grupo de aficionados que se ubica allí. Pero no sólo Biris Norte agradece la noticia, ya que muchos otros aficionados e incluso el cuerpo técnico y la plantilla habían venido reclamando una solución. La buena voluntad del grupo radical en el partido ante el Rayo Vallecano, en el que dejaron a un lado los insultos para reclamar una solución durante la primera parte y animar al equipo en la segunda, ha sido clave, como también ha sido fundamental la predisposición del club a encontrar una entente.

Prueba de ello han sido las diferentes reuniones que Pepe Castro e incluso Monchi ha tenido con los representantes del significado grupo de animación. Es el gesto más esperado en lo concerniente a las relaciones entre clubes y aficionados y llegará en plena Semana de la afición, que ayer tuvo su día más completo. "Yo creo que en esta semana quedarán solventadas todas las diferencias que hay con ese grupo de aficionados de Gol Norte. No os puedo decir nada más, lo diré en el consejo de administración ordinario, ahí adoptaremos las medidas", anunció el presidente en su comparecencia en el CEIP Juan de la Cueva, ante varios aficionados que disfrutaron de una completa jornada de trabajo del presidente del Sevilla.

El club ha tenido que pedir permiso a la Policía Nacional para revocar las medidas de control y la retirada de las vallas de separación, principal motivo de reivindicación de Biris Norte, será un hecho. No obstante, esta marcha atrás después del primer acuerdo antes del derbi, seguirá estando condicionada al comportamiento de los aficionados más radicales, que se han comprometido a controlar ellos mismos los posibles actos violentos. "La tolerancia seguirá siendo cero -dijo Del Nido-, pero al mismo tiempo una vez que durante tantos meses hemos estado tomando medidas exhaustivas de control, entendemos que llegados a este punto el consejo debe valorar si algunas de esas medidas deben seguir o no. Es factible compaginarlo todo. Tenemos un informe realizado por el encargado de seguridad que se presentará en el consejo y se tomarán las medidas que entendamos que en este momento se pueden adoptar", explicó dando por hecho el acuerdo.

Fue el asunto principal de su comparecencia. El otro fue la deuda que el club mantiene con parte de la plantilla y que, según anunció el dirigente sevillista, está siendo solventada en varias reuniones con los jugadores afectados. Del Nido sacó pecho, e incluso presumió de la gestión financiera del Sevilla, y rechazó de plano que corra peligro la clasificación para competiciones europeas por no estar al día en los pagos pendientes, ya sea con los jugadores, con Hacienda o con otras entidades: "Yo personalmente la semana pasada estuve reunido con los jugadores del plantel con los que tenemos atrasos de la campaña 11-12, en grupos de cinco. De los 25, son 11 los jugadores que tienen esos atrasos. Y los cinco abonados del Sevilla que han estado conmigo esta mañana han podido constatar cómo con los pagos que se realizarán esta semana, de los 42 millones de euros, que es el montante total de salarios de la plantilla, quedarán pendientes de pago 3,25 millones, que no alcanza ni el 8% del salario". Esa deuda se saldará con pagarés "a menos de cinco meses". Fue más allá Del Nido, al afirmar que "el 90% de las entidades deportivas de este país quisiera estar en la situación financiera del Sevilla Fútbol Club".