En la última Junta de Accionistas, aparte de la crudeza de las palabras del presidente por la situación económica, fue José María Cruz quien abrió los ojos a muchos sevillistas desnudando, uno a uno, esos números de un presupuesto que no cuadraba. La prematura eliminación del Sevilla de la Liga Europa a manos del Hannover 96 tuvo su peso y el director general dejó claro que los diez millones de euros largos dejados de ingresar debían ser sufragados con una venta. Al mes siguiente Martín Cáceres era cedido a la Juventus en unas condiciones que encerraban un traspaso encubierto que se ha hecho efectivo con el Scudetto alcanzado por la Juve (quedar entre los ocho primeros obligaba a ejercer la opción de compra por 9,5 millones).

Ahora, tras el fracaso que ha supuesto la temporada del Sevilla, fuera de cualquier competición continental sin necesidad de perder como en las dos campañas anteriores en el play off, las dudas en torno al futuro se ciernen sobre los activos más importantes que tiene su plantilla. Y no hace falta hacer muchos estudios de mercado para saber que, del patrimonio humano que tiene el Sevilla, los más cotizados son Jesús Navas y Negredo. A día de hoy es una incógnita saber si la entidad blanca va a poder mantener en el equipo a estos dos internacionales que, posiblemente, al menos uno de ellos, estarán en el equipo nacional durante la próxima Eurocopa y no es descartable que los dos. Bien es cierto que el verano no va a arrojar grandes operaciones por la crisis y lo que afecta al fútbol, pero los grandes clubes de España y de Europa sí van a ser los únicos que animen el mercado y van a ir a por los jugadores importantes.

El Sevilla va a necesitar vender para renovar su plantilla y no parece claro que la entidad esté en disposición de hacer como el verano pasado, cuando Del Nido aseguró que había rechazado una oferta por Perotti de 14 millones de euros y otra por Negredo de 30. Esas propuestas no van a volver, mucho menos por el argentino (por el que volvió a rechazar 8,5 en invierno), pero será el Sevilla el que decida si puede aguantar sin dar su brazo a torcer en caso de oferta por Negredo o por Navas o si su economía soporta mantenerlos en la plantilla.

Después habrá que ver si, en el caso del palaciego, el jugador estaría por labor de salir fuera, pues ya se ha hablado largo y tendido de que siempre fue reacio a ello. Pero desde que Navas cambió de representantes su discurso es otro, pues siempre deja una puerta abierta, aunque quizá luego la realidad sea otra y le tenga cierto temor a emprender una aventura fuera. "Estoy muy a gusto aquí y lo que quiero es seguir creciendo, pero seguir en el Sevilla depende del club. Yo estoy muy contento y aquí se me ha dado todo. Lo que quiero es crecer e ir cada día a más". Ésas fueron sus palabras este miércoles. Pero todavía el baile no ha empezado. Cuando la Eurocopa se acerque los rumores arreciarán y, aunque el Sevilla preferiría que fuera con otros, se centrarán en estos dos jugadores. Quizá también por Medel, pero sólo controla el 50% del pase.