Un informe de la Cámara de Cuentas de Andalucía, que ha fiscalizado datos de varias áreas del Ayuntamiento de Dos Hermanas correspondientes a 2014, ha advertido de las anomalías detectadas en materia de personal, en dos aspectos: el abuso de la contratación temporal y la falta de los procesos selectivos que prevé la ley para trabajar en la administración pública.

En el documento, se destacan además que se están produciendo “irregularidades” en el funcionamiento del Registro Contable de Facturas (con saltos importantes) y en la ejecución de algunos programas presupuestarios, en uno de los municipios que se ponen de ejemplo por su solvencia pero que, según este informe, en 2014 no cumplió con la regla de gasto, sin tomar las medidas que prevé la ley, y mantenía como ingresos pendientes de cobro varios millones de euros de impuestos que podrían estar prescritos o son de dudoso cobro y que podrían dar otro resultado en sus cuentas si se actualizaran.

Como ejemplo de las anomalías en personal, se alude al caso del Patronato Municipal de Deportes (PMD), que se liquidó en 2014 y cuyos trabajadores fueron subrogados por el Consistorio que preside desde 1983 el socialista Francisco Toscano, a pesar de que tanto “los trabajadores laborales indefinidos y los temporales fueron contratados por el PMD a través de un proceso de selección no sometido a la preceptiva convocatoria pública”. “Tampoco el Ayuntamiento ha iniciado proceso alguno para regularizar tal situación”. Los auditores advierten que hay contradicción entre el número de trabajadores que consta en un informe de Intervención, 175, y el de la subrogación, 168.

El alcalde, Francisco Toscano.

Estos incumplimientos se repetirían con otro personal del Ayuntamiento y sus entidades. En 2014, sumaban una plantilla de 1.028 personas, aunque el Ayuntamiento no facilitó la relación nominativa a la Cámara de Cuentas. El 24,12% son funcionarios (248); dos, eventuales; y el 75,68% es personal laboral: 161 fijos y 617 indefinidos. Según la Cámara de Cuentas, el acceso de estos 617 trabajadores laborales indefinidos se ha realizado “con incumplimiento de los principios constitucionales de mérito, capacidad e igualdad de oportunidades” .

En las recomendaciones, se insta al Ayuntamiento a iniciar procesos selectivos para regularizar esta situación y a “implantar” controles internos que “alerten” de los casos en los que la concatenación de contratos puede ser irregular, con consecuencias jurídicas.

Y es que el riesgo de que se estén produciendo más situaciones como la de esos trabajadores es alto, debido al abuso que el municipio de más de 130.000 vecinos hace de la contratación temporal. En 2014, “se contrataron a 750 trabajadores temporales, que unidos a los 500 que lo estaban al comienzo del ejercicio y a los 435 que finalizaron sus contratos, suman 815 a la finalización de 2014”.

Sorprende “el amplio abanico de sectores, funciones y categorías profesionales que el Ayuntamiento califica en sus bases como de prioritarios”, para permitirlos, lo que ha “desvirtuado” el carácter “de excepcionalidad” de estas modalidades de contrato temporal, dicen los auditores. Los gastos que ocasionaron, sin incluir seguros sociales ni programas subvenciones, superaron los 4,2 millones de euros, “demasiado elevado”.

La Cámara de Cuentas insta a corregir esas anomalías y a fijar más controles internos

Entre los aspectos que se han fiscalizado está además el control interno del Ayuntamiento y se ha alertado de que falta “un plan de contingencias informático” y de manual de procedimientos en materia de seguridad informática. Cuando el Consistorio de Dos Hermanas presentó su Cuenta General en 2014 aseguró que Intervención no había planteado reparos, pero se han detectado irregularidades en personal y en varias modificaciones presupuestarias (en al menos dos, por más de 934.000 euros, hubo “infracción del ordenamiento jurídico” por reconocer obligaciones que, sin ello, hubiera carecido de consignación). En el informe de la Cámara de Cuentas, órgano dependiente del Parlamento andaluz, se recuerda que el propio interventor municipal ha avisado de que las funciones de contabilidad y fiscalización deben hacerse por separado, pero no era así en 2014.

En materia presupuestaria, se destaca que el Ayuntamiento no gastó el 28% (659.267 euros) del dinero del superávit que destinó a inversiones financieramente sostenibles, dinero que tampoco fue a reducir el endeudamiento, lo que, en caso de una “conducta culpable”, podría suponer una infracción muy grave de la ley.

En materia de endeudamiento, la Cámara de Cuentas reprocha al Consistorio que no haya informado en su memoria de 2014 de los avales que concedió a la empresa municipal Dehesa de Valme, por 400.000 euros, y a Apuesta Mutua Andaluza (la empresa del hipódromo), por más de 600.000. Sobre esta última destaca además que estaba en situación de desequilibrio financiero sin que se hubiera iniciado su disolución.

También habla de problemas con el Registro Contable  de Facturas, en el que se detectaron hasta 1.628 saltos en la numeración y 133 facturas no inscritas, “lo que evidencia una incertidumbre sobre la integridad de sus datos”. Además, el 95,27% de las facturas que se anotaron no habían sido presentadas previamente en un registro administrativo como exige la ley, por lo que se insta también a “poner en marcha actuaciones” para subsanar estas irregularidades y a incluir en la cuenta general toda la documentación requerida por normativa contable y presupuestaria local. Por otro lado, se advierte que la junta de gobierno local está aprobado reconocimientos extrajudiciales de crédito (por más de medio millón de euros en 2014) como si fueran gastos del ejercicio, sin dejar constancia de su carácter. 

A los auditores también les llama la atención que el Consistorio no haya adaptado su estructura organizativa a la requerida para un municipio de Gran Población, una condición que solicitó y que fue aprobada en el Parlamento en 2013 y que implica, entre otras cosas, la creación de distritos.