La empresa tecnológica Indra alcanzó un beneficio neto en el primer trimestre del año de 22,3 millones de euros, un 255,3% más que en el mismo periodo del ejercicio pasado, cuando su resultado fue de 6,3 millones de euros, con lo que ha retornado así a niveles previos a la pandemia.

Su facturación también ha crecido en el primer trimestre del año hasta los 761,4 millones de euros, un 2,2% más que en el mismo periodo de 2020, según ha comunicado a la Comisión del Mercado de Valores (CNMV) este martes tras cerrar el mercado bursátil.

Los ingresos crecieron en el área de transporte y defensa, hasta los 263 millones de euros (un 7,3% más), mientras que descendieron en Minsait, hasta los 489 millones de euros, un 0,3% menos.

A través de Minsait, Indra adquirió a finales de 2020 el 70% de la empresa italiana SmartPaper, una compañía tecnológica de externalización de procesos de negocios, que ha facturado 9 millones de euros en este primer trimestre de 2021.

Por geografía, los ingresos cayeron hasta los 388 millones de euros en España, un 1,1% menos que en el mismo periodo de 2020, y a 138 millones en América, un 7,8% menos. Por el contrario, crecieron en Europa, hasta los 144 millones, un 9,9% más, además de en Asia, Oriente Medio y África, donde aumentaron hasta los 81 millones de euros, un 31,2% más.

Todo ello en un contexto en el que el tipo de cambio de moneda no solo no favorece a la compañía, sino que le ha restado 24 millones de euros en ingresos principalmente por la depreciación de las divisas latinoamericanas (real brasileño y pesos mexicano y peruano), según Indra.

En este primer trimestre, la contratación neta cayó en un 8,2% respecto al mismo periodo de 2020, aunque la cartera de pedidos creció un 10,9%, hasta los 5.322 millones de euros, y se situó en su máximo histórico.

El resultado de explotación (EBIT) alcanzó los 39 millones de euros hasta marzo en 2021, un 103,7% más que hasta el mismo mes en 2020.

El flujo de caja libre fue de menos 17 millones de euros, frente a los menos 59 millones de 2020. Si se excluyeran los 11 millones de euros que salieron de caja para el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) aplicado en la compañía, el flujo de caja libre sería de menos 6 millones de euros.

En cuanto a la inversión en capital (Capex) se ha situado en 4 millones de euros en el primer trimestre, 14 millones menos que en el mismo periodo de 2021, debido a la menor inversión inmaterial derivada del plan de acción, al menor volumen de inversión material tras la desinversión de Metrocall, así como por el mayor cobro por subvenciones.

La deuda neta de Indra se situó en 505 millones de euros a finales del trimestre, un 20,3% menos que en el mismo ejercicio de 2020.

Resultados mejores que antes de la pandemia

El presidente ejecutivo de Indra, Fernando Abril-Martorell, ha valorado estos resultados que muestran la recuperación de los niveles de actividad que se sitúan a niveles previos prepandemia, al tiempo que reflejan una mejora de márgenes por la contención de costes.

El beneficio neto en este trimestre de 2021 es un 22% superior al de 2019.

Los objetivos para 2021 pasan por alcanzar unos ingresos superiores a 3.200 millones de euros en moneda constante; y por tener un Ebit superior a 200 millones.

La plantilla final al cierre de marzo de 2021 era de 48.979 empleados, lo que supone una caída del 2% respecto al mismo año, al contar con 1.019 empleados menos, pese al incremento de la plantilla por la adquisición de SmartPaper, inicialmente con 1.047 empleados.