El presidente de Ryanair, Michael O'Leary, culpó ayer a la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas Irlandesas (Ialpa) del "alarmismo" generado en torno a la actividad de la aerolínea, a la vez que recordó que otros tres aviones realizaron aterrizajes forzosos en el aeropuerto de Valencia el mismo día debido a las condiciones climatológicas. Dos de las naves eran de la low cost EasyJet mientras la tercera pertenecía a LAN.

El directivo de la compañía recalcó que está "seguro" de que Ryanair cumplió con todas las normas de seguridad. O'Leary recordó que en marzo también se produjo un aterrizaje de emergencia por otra compañía y no tuvo repercusión. "Es la temporada tonta y han terminado los Juegos Olímpicos, así que vamos a hablar y escribir un montón de mierda sobre los aviones de Ryanair que se están quedando sin cumbustible". O'Leary también mencionó los informes semanales sobre el rendimiento de combustible, negando que pueda existir intimidación por ello.

Por su parte, el presidente del Sepla, Javier Martínez de Velasco, apuntó que Ryanair fue la única compañía que declaró aterrizaje de emergencia en Valencia, aunque reconoció que otras aerolíneas sufrieron percances. Asimismo, añadió que éstas optaron por el aterrizaje alternativo al contar con combustible suficiente. Martínez de Velasco se mostró comprensivo ante la preocupación de los controladores al apuntar que "indudablemente Ryanair bajó de los límites mínimos de su combustible". Por último, el Sepla apuntó a que España sólo podría prohibir la actividad de Ryanair en territorio nacional.