En plena crisis sanitaria y económica provocada por el coronavirus, parece que se abre un mundo de posibilidades de cara al futuro laboral de las personas. La pandemia y el confinamiento han hecho que el mundo avance de manera considerable en digitalización que, unido al cambio de mentalidad, hará de los próximos años una auténtica revolución.

La mayoría de profesionales han visto sus condiciones laborales alteradas este último año debido a la epidemia y a esta revolución en el mundo del trabajo. Los expertos llaman a este fenómeno "doble alteración" y consiste en un proceso que consiste en transformaciones que se irán dando a corto plazo debido, entre otras cosas, a los problemas económicos que afrontan los países.

Revolución laboral a raíz de la pandemia

De aquí a cinco años, el Foro Económico Internacional cree que, con una buena adaptación a las nuevas tecnologías y una formación correcta, se abre un panorama nuevo para las generaciones venideras. Como si de una revolución industrial se tratase, el foro cree que en la próxima década se crearán muchos puestos de empleo y habrá cambios muy significativos. Las inversiones de las compañías y los diferentes organismos públicos harán que se produzcan los siguientes cambios:

La automatización es un hecho en el mundo laboral

Los avances tecnológicos harán que en los próximos años se produzca una automatización general en los diferentes sectores. Se cree que más de 80 millones de empleos desaparecerán. Aún así, la irrupción de nuevas formas de gestión y el uso de la inteligencia artificial necesitarán de mano de obra humana para llevar a cabo los procesos. Estamos ante un futuro donde los humanos y las máquinas seremos compañeros de jornada.

Casi 100 millones de nuevos empleos gracias a la tecnología

Tras una crisis se dice que aparecen siempre nuevas oportunidades y hay que verla como un  momento propicio para encarar el futuro con garantías. En este sentido, se crearán casi 100 millones de nuevos empleos con esta nueva revolución tecnológica. Todo lo relacionado con el mundo de la sostenibilidad, inteligencia artificial o análisis de datos, serán el futuro marco laboral de los jóvenes.

Otras ramas que crecerán serán el cuidado de personas, el marketing o las ventas y los puestos de trabajo que más garantías ofrecerán serán: especialistas en el aprendizaje de máquinas, transformación digital, desarrolladores de aplicaciones o agentes de la seguridad digital.

El pensamiento analítico, la creatividad y la flexibilidad, habilidades fundamentales

Nuevos trabajos, un mundo laboral completamente diferente y, por tanto, se necesitan nuevas habilidades en las personas. En los próximos cinco años, estas habilidades deberán girar en torno al pensamiento analítico, la creatividad en todas sus vertientes y la flexibilidad. Además, la autogestión, resiliencia o el aprendizaje activo, serán esenciales en unas jornadas laborales de cuatro días.

Las empresas apostarán más que nunca por sus empleos

La digitalización hará que tanto las grandes compañías como las pequeñas empresas puedan competir en un mismo nivel del mercado. Por ello, un aspecto que será diferenciador será la capacidad y formación de sus trabajadores. El mundo empresarial intentará por todos los medios gestionar las destrezas de sus asalariados. Para ello, optarán por un aprendizaje constante de sus plantillas y ese aprendizaje deberán ir poniéndolo en práctica en todo el desarrollo productivo en sus puestos.

Las oficinas tienen los días contados en este nuevo marco laboral

La crisis sanataria ha echo que muchas personas trabajen durante meses desde sus casas. Pues bien, los resultados han sido tan positivos que las empresas empiezan a ver que la productividad de las horas que trabajan sus empleados y los ahorros en instalaciones son razones de peso para optar por el teletrabajo. en relación a esto, más del 80% de los trabajadores cree que puede digitalizar por completo su hogar. Aún así, los grandes núcleos empresariales (78%) son detractores de esta vertiente ya que creen que bajarán los índices de productividad.

Por último, aquí aparece la desigualdad entre países. Por tanto, esta acción podrá llevarse a cabo en algunas zonas pero otras, estarán completamente alejadas de este modelo.