El Gobierno prohíbe el paso a Gibraltar de camiones con piedras

El departamento de Aduanas, dependiente del Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas, decretó ayer la prohibición del paso de camiones con piedra -en concreto roca de escollera- a Gibraltar, según informaron fuentes del ministerio a Europa Press. La decisión fue adoptada tras recibirse un escrito de la Fiscalía General del Estado a raíz de una denuncia de los armadores. Éstos esgrimen que la construcción de dos espigones que lleva a cabo Gibraltar puede dañar el ecosistema y determinadas especies protegidas.

Informes oficiales han certificado la construcción de rellenos y sendos espigones entre los puntos del peñón conocidos como Eastern beach y Catalan bay, una zona de gran valor ecológico que constituye el hábitat de la especie patella ferruginea, una lapa considerada como uno de los invertebrados en mayor riesgo del Mediterráneo.

La presencia de esta especie en peligro ha obligado a adoptar medidas de compensación ambiental en infraestructuras de la zona del Estrecho, como en el puerto de Ceuta, y ha sido objeto de alegación para la paralización de proyectos como la ampliación del Puerto de Tarifa.

La prohibición se suma a la que adoptó España a finales de julio, cuando impidió la entrada en Gibraltar a varios camiones cargados de hormigón tras la denuncia interpuesta por el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente que dirige Miguel Arias Cañete por el vertido de bloques de hormigón en aguas próximas a Gibraltar.

Mientras, los accesos a Gibraltar volvieron a colapsarse ayer por la mañana hasta formarse colas de dos horas por la intensificación de los controles policiales en la frontera, situación derivada del conflicto diplomático entre España y la colonia, y por la mayor afluencia de vehículos en fin de semana.

Según confirmaron a Efe fuentes policiales, las colas han comenzado a formarse a primeras horas de la mañana, tanto en la entrada como en la salida del Peñón. Las mayores retenciones se produjeron entre las 10.00 y las 12.30 horas.

Los accesos de entrada a Gibraltar desde La Línea de la Concepción (Cádiz) fueron los más perjudicados, con picos de espera que han llegado a las dos horas de duración. Las colas no han sido especialmente largas, pero los vehículos se vieron afectados por controles rigurosos, lo que ha provocado largas esperas.

Incluso, según han indicado las mismas fuentes, hubo colas de hasta una hora para ciclomotores y bicicletas, debido a constantes requerimientos de documentación, algo que, de forma inusual, ha afectado también a los peatones.

La salida de Gibraltar hacia la frontera registró también colas, aunque de menor intensidad.