El rodillo independentista en el 'Parlament' abre paso al 1-O

Junts pel Sí y la CUP modificaron el orden del día para incluir la aprobación de la ley del referéndum por la vía de urgencia, forzaron el reglamento del Parlament , ignoraron el dictamen del Consejo de Garantías Estatutarias y el informe de los letrados de la Cámara, vetaron las enmiendas a la totalidad de la oposición, a la que concedieron solo dos horas para presentar enmiendas parciales, y finalmente los independentistas aprobaron, -con los escaños vacíos del PSC, PPC y Ciudadanos- la ley del referéndum para amparar la votación anunciada el 1 de octubre, en uno de los debates más tensos y maratonianos de la historia de la Cámara.

Tras una tramitación exprés con un crispado pulso procedimental desde las nueve de la mañana entre las fuerzas independentistas y la oposición, que obligó a suspender el pleno media docena de veces para reunir a la Mesa del Parlament, el debate sobre la ley de referéndum culminaba a las 21.30 horas con la votación final y casi medio Parlament vacío.

La ley que dará cobertura al referéndum fijado para el 1 de octubre obtuvo 72 votos a favor de los grupos independentistas de JxSí y la CUP y del diputado no adscrito, Germà Gordó, ninguno en contra y 11 abstenciones de Catalunya Sí Que Es Pot, mientras que los diputados de Ciudadanos, el PSC y el PPC abandonaban el hemiciclo, como habían anunciado, antes de la votación.

A su término de la votación, los diputados independentistas y los miembros del Govern entonaron Els Segadors, acompañados por una nutrida representación soberanista en la tribuna de invitados, entre ellos el ex president Artur Mas y los presidentes de la Asamblea Nacional Catalana, Jordi Sánchez, y de Òmnium Cultural, Jordi Cuixart.

La norma se fundamenta en un preámbulo que reivindica el derecho a la autodeterminación como el primero de los derechos humanos y constata que lo recogen varios tratados internacionales.

El referéndum no exige una participación mínima y los resultados son "vinculantes": si gana el sí, la ley de transitoriedad jurídica entraría en vigor y el Parlament declararía la independencia en 48 horas y si ganara el no se convocarían unas elecciones autonómicas.

La presidenta del Parlament, Carme Forcadell. hizo caso omiso de los informes del secretario general de la Cámara, Xavier Muro, y el letrado mayor del Legislativo, en los que alertaban de que la tramitación de las leyes de ruptura chocaba con las advertencias del Tribunal Constitucional.

Además, el Boletín Oficial del Parlament hizo publica la ley del referéndum tras ser admitida a trámite, lo que desató una nueva polémica, al denunciar los grupos de la oposición que esta oficialización fue ordenada por Junts pel Sí y no por el secretario general de la Cámara catalana.

El líder de JxSí, Lluís Corominas, defendió la aprobación de la ley: "Hoy no termina nada, hoy empieza todo", y aseguró que organizar este referéndum está amparado por los derechos humanos y por los derechos fundamentales de los pueblos.

Los independentistas tomaron anoche una última decisión sorpresa: convocaron un nuevo pleno extraordinario en el Parlament para mañana. Junts pel Sí y la CUP piden un "debate general" sobre la situación política.

Firma del decreto de convocatoria de 1-O

Puigdemont, y sus consejeros firmaron luego en el Parlamento catalán el decreto de convocatoria del referéndum soberanista para el 1 de octubre.

En la sala 4 del Parlament, donde los miembros del Govern se encontraban reunidos desde las 22:30, el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, y sus consellers han firmado poco antes de las 23:30 el decreto por el cual queda convocado el referéndum sobre la independencia de Cataluña para el 1 de octubre.

Después, Puigdemont ha firmado y promulgado la ley del referéndum de autodeterminación de Cataluña, que posteriormente ha sido publicada primero en el Boletín Oficial del Parlamento de Cataluña y, a continuación, en el Diario Oficial de la Generalitat de Cataluña.

La ley establece que el 1 de octubre se celebre un referéndum con la pregunta: "¿Queréis que Cataluña sea un Estado independiente en forma de república?".