El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, aseguró ayer que aspira a ganar al PP "en votos y en escaños" y rehusó decir expresamente si intentará gobernar en caso de no conseguirlo. No obstante, recordó que la democracia española es parlamentaria, es decir, que gobierna quien logra el apoyo de una mayoría de parlamentarios.

"Antes de ganar un partido uno no puede decir qué va a pasar si no gana", recalcó en una entrevista en Telecinco, subrayando que las encuestas muestran que el 70% de los españoles no quieren a Rajoy como presidente y que no quieren "cambiar una mayoría absoluta por otra", sino por partidos que se puedan entender y "el PSOE tiene mayor capacidad de diálogo con otras formaciones".

Además, aseguró que se ha alegrado mucho de lo que ha pasado en Portugal -donde una coalición de izquierdas ha desbancado al Gobierno conservador en minoría- porque el país vecino tendrá un Ejecutivo de izquierdas, igual que Francia e Italia. A su modo de ver, "España no puede ser una isla" y sería bueno que todo el sur de Europa tuviese gobiernos de izquierdas.

El candidato del PSOE agregó que el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, no acudirá a los dos debates electorales a cuatro que los socialistas quieren celebrar de cara a las elecciones generales, así que auguró que serán debates entre tres, es decir, el propio Sánchez con los líderes de Podemos y Ciudadanos, Pablo Iglesias y Albert Rivera, respectivamente. "Me imagino que al final los debates serán a tres, y me imagino que habrá un cara a cara", insistió.

Sánchez se reunió ayer en la sede de Ferraz con el equipo de expertos que colabora con el PSOE en la redacción del programa electoral.