Angelina Jolie y Brad Pitt 'inspeccionan' la Costa del Sol
La pareja más bella se relaja en Casares de los preparativos de su próxima boda en Los Ángeles.
Podrían estar buscando un nueva vivieda en Europa, para no perder ni un día posible de buen tiempo o simplemente buscaban relajarse sin más intención de cara a una boda que les está estresando. Angelina Jolie y Brad Pitt han hecho una escapada a la Costa del Sol, a Marbella y a Casares, para disfrutar un poco del verano andaluz y encontrar un respiro entre tantos quehaceres laborales y familiares y misiones como la representación como embajadora del organismo de refugiados ACNUR que asume la bella actriz.
La 'pareja perfecta' va a casarse en unas semanas, sin fecha anunciada de forma pública, y lo harán en su vivienda californiana. De entre los hijos, la pequeña Zahara será la dama de honor, mientras el resto, Maddox, Pax, Shiloh y los gemelos Knox y Vivienne ya han ensayado sus papeles en la ceremonia. La prole se quedó en casa para esta escapada romántica en la Costa del Sol que efectuaron los excitados papás.
Una de las razones que se especulan de esta presencia de los Brangelina en nuestro Sur es la búsqueda de una nueva residencia, por lo que entre comidas a solas y paseos en coche, los actores han 'inspeccionado' algunas de las exclusivas urbanizaciones costasoleñas para buscar una alternativa más calurosa a la mansión que tienen en Francia, el castillo Miraval, en la Provenza, donde en principio se especuló que iban a celebrar su tan aplazada boda. El enlace se producirá (presumiblemente en septiembre) en Los Angeles con la única razón de poder contar con todos sus mejores amigos. La distancia era un inconveniente para que muchos se desplazaran unos días a Francia.
En un respiro a ese ajetreo, la pareja estuvo de incógnito por Marbella en lo que algunos medios han entendio como una "despedida de solteros", lo que ha avivado aún más las alarmas entre las revistas y fotógrafos.
Brad y Angelina quisieron pasar totalmente desapercibidos en este viaje que vino a seguir un tanto los pasos que hace dos años dio la primera dama estadounidense, Michelle Obama, cuando se decantó por la Costa del Sol. La pareja podría dar la sorpresa de ser los nuevos vecinos.
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