Endless road, 7058 es el título del álbum (que acaban de reditar incluyendo DVD y temas nuevos) con el que los integrantes de Auryn han revolucionado el mercado y, a la vez, es el fruto de un trabajo con el que Dani, Álvaro, Carlos, Dani y Blas llevan implicados desde hace bastante tiempo. "No venimos de un casting sino que nuestro proyecto nace de la amistad y eso es positivo", explican estos cinco simpáticos chicos adolescentes pero de marcada personalidad.

Así, David, granadino de 22 años, es, según sus compañeros, un "cabeza loca, siempre despistado y muy cariñoso". Álvaro, por su parte, es un madrileño de Alcalá, también de 22 años, cuenta en su currículum con experiencias en espectáculos musicales como Los Miserables y, por su actitud responsable, es un poco el papá del grupo. En cuanto a Carlos, nacido en Alicante, es considerado "inteligente, trabajador y chistoso" y de Dani, de 20 años y originario de Alcázar de San Juan, podemos afirmar que se trata de alguien "hiperactivo y muy familiar". Por último, Blas, murciano de 20 años, presume de sinceridad y de una autoexigencia que, cómo no, también extiende al resto de esta simpática boyband que llega con intención de quedarse. "Queremos seguir el mismo camino que otras formaciones del Reino Unido similares como Take that o Back street boys y por ahora no está en nuestros objetivos separarnos", aclaran ante quienes puedan ver en Auryn una apuesta fugaz.

Emocionados con cada una de sus presentaciones ante el público, nuestros entrevistados agradecen las muestras de cariño que reciben de sus seguidoras. "Nos emociona cuando nos dicen que somos un ejemplo y que, si lo hemos conseguido, otros también pueden hacerlo", explican para continuar. "En Valencia nos impactó cómo una madre nos dio las gracias por hacer feliz a su hija".

¿Novias? ¿Parejas? ¿Amor? Tres posibilidades diferentes para una misma respuesta. "Enamorarse es difícil", aclara Blas bromeando. "No creo que haya nadie que pueda aguantarme. En todo caso tendría una mascota pero no una relación". Una reflexión que, si seguimos indagando, los demás comparten. "No estoy preparado", "es complicado", "tiene que ir todo con mucha tranquilidad porque por esta profesión es difícil", afirman.

Sin vivir obsesionados por ello sí intentan cuidarse para dar, también en lo que a la imagen se refiere, lo mejor de sí mismos. "No tenemos el look estudiado al milímetro aunque, sin tener cuerpos musculosos, sí hacemos deporte. No somos modelos pero tampoco feos y cada uno tiene su público. En general, al conocernos solemos gustar…", exponen con humildad.

Y es que la sencillez es uno de los rasgos que más unen a estos luchadores los cuales, desde el principio, han contado con el apoyo de su familia ya que, desde muy pequeñitos, lo tenían claro. "Lo único que nos preguntan es si somos felices", declaran. "Mantenemos los mismos amigos de siempre y el mismo círculo y eso provoca que nuestro día a día apenas haya cambiado y no nos hayamos vuelto locos". Componen sus canciones porque son dueños de su presente y, ante la libertad que su discográfica les permite en la construcción de su trayectoria, se sienten unos privilegiados. Queda por escribir un incierto futuro que, con ilusiones como las de Auryn, solo deja adivinar excelentes presagios.