La aldaba
Carlos Navarro Antolín
La Sevilla de las colas
Telas vaporosas y mucho paillette marcaron tendencia en la alfombra roja que se desplegó en el Teatro Kodak de Los Ángeles para acoger la 64 edición de los Emmy Awards, los premios más importantes de la televisión. Una red carpet glamourosa y sofisticada, como es habitual en Hollywood, que en esta ocasión desterró los tonos sobrios apostando por el colorido en estado puro. Desafiando a todas las supersticiones posibles, el amarillo se convirtió en absoluto protagonista de la noche. Julianne Moore triunfó con un vestido voluminoso de manga larga de Christian Dior en este tono, el mismo por el que también optó Claire Danes, entre otras intérpretes.
A pesar de que la elegancia fue la nota predominante de la noche, hubo una clara ganadora en estilo y esa fue la actriz Sofía Vergara. La colombiana puso el toque de sensualidad a la noche con un ceñido vestido tipo sirena en color azul turquesa que realzaba sus curvas de infarto. Por la paleta de azules también se decantaron otras célebres invitadas como Nicole Kidman o la imponente modelo Heidi Klum. La primera encandiló con un elegante vestido sencillo y minimalista de corte recto y escote caja firmado por Antonio Berardi que complementó con joyas de Fred Leighton. La maniquí, por su parte, fue una de las más aplaudidas con un diseño de Alexandre Vauthier vaporoso y en color aguamarina de escote de vértigo, que dejaba una de sus interminables piernas al descubierto. La entrega se convirtió en un auténtico desfile de vestidos en colores intensos y veraniegos, pero también hubo quien optó por el siempre elegante negro. El modelito de Zac Posen de January Jones no tenía nada que ver con los del resto de las celebrities, pero eso no fue un impedimento para que la actriz se convirtiera en una de las estrellas más elegantes.
Los generosos 'tropiezos' de la colombiana
La belleza latina se convirtió en la estrella más aclamada de la alfombra roja pero su espectacular, y ceñidísimo, vestido le jugó una mala pasada. Además de retocar constantemente su escote dejando claro que sus atributos son muchos (y están muy bien puestos), a la actriz se le rompió el modelito por el trasero dejando al descubierto un tanga de lo más sexy. Su equipo de ayudantes arregló en un plis la cremallera traidora pero la actriz, ni corta ni perezosa, quiso compartir el momentazo con todos sus seguidores de Twitter.
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