El abogado Iñigo Moreno Lara ocupó las primeras páginas de los periódicos a partir de 2010 por haber sentado en el banquillo al juez Francisco Serrano, ahora parlamentario andaluz de Vox. El letrado acumula desde el año 2013 un total de 14 sentencias en su contra, en su mayor parte por desórdenes públicos en juzgados y tribunales, que han llevado ahora al juzgado penal 12 a negarle por su “peligrosidad” la suspensión provisional de una de sus últimas condenas.

Moreno Lara está ingresado en la cárcel madrileña de Aranjuez. En  un auto al que tuvo acceso este periódico, el juzgado penal 12 de Sevilla rechaza la suspensión provisional de su última condena de seis meses de prisión basándose en la hoja histórico-penal de las resoluciones que pesan contra él.

Se trata de 14 sentencias de juzgados de Sevilla, Madrid, Segovia, Bilbao y A Coruña que totalizan 26 delitos, 75 meses de cárcel y 114 meses de multas. A ellos se unen la correspondiente inhabilitación para el ejercicio del sufragio pasivo y 17 meses de inhabilitación como abogado. Una de las sentencias le impuso además dos años y medio de prohibición de acudir a un tribunal o juzgado, que terminará de cumplir en junio de 2022.

Según el auto del juzgado penal 12, al que tuvo acceso este periódico, tales sentencias “denotan una peligrosidad del condenado que no se hace merecedora del beneficio de la suspensión de la ejecución de la pena impuesta”, tal como pidió la Fiscalía. La juez recuerda las condiciones de la suspensión provisional: que el condenado haya delinquido por primera vez, que la suma de las penas impuestas no sea superior a dos años y tiene en cuenta el tipo delictivo por el que ha sido condenado, en su mayor parte desórdenes públicos e injurias.

También incluyen calumnias, desobediencia a la autoridad, atentado, resistencia y una condena de 21 meses de prisión por violencia de género.

La Audiencia dedujo testimonio por nuevas injurias en un recurso

Junta a estas resoluciones ya firmes, en febrero pasado el juzgado penal 4 de Sevilla le impuso otras condenas de 6 meses de cárcel por desórdenes públicos y tres meses de prisión por desobediencia a la autoridad, por un altercado de una hora y diez minutos de duración desarrollado en 2016 en los juzgados de Violencia contra la Mujer de Sevilla.

Posteriormente, la Audiencia provincial ordenó deducir testimonio contra él por otro presunto delito de injurias en un recurso.