Las cuatro generaciones anteriores del 911 han contado con versiones GT3, que es la base para los modelos de carreras de este modelo de Porsche. Y también todos esos 911 GT3 lanzados desde el inicio de este siglo han tenido su derivado RS, que es la abreviatura en alemán de RennSport, “carrera deportiva”, la máxima formalización de como un coche de circuito puede llegar a la carretera.

Una aerodinámica extremadamente eficiente y un motor atmosférico son aspectos que marcan, junto a la ligereza, a este nuevo miembro de la familia 911.

Bajo el capó delantero no hay un maletero, sino que se sitúa un radiador que, así, deja sitio en los laterales para situar elementos aerodinámicos activos.

Así, por ejemplo, donde otras versiones tienen un maletero, en el GT3 RS se sitúa un radiador de modo que su situación permite liberar los laterales para situar elementos aerodinámicos activos.

La combinación de éstos, junto a los situados en la zona frontal o el alerón trasero dividido en dos partes -una zona fija y otra móvil- proporcionan 409 kilos de carga aerodinámica a 200 km/h, es decir, el doble que su predecesor de la generación GT3 RS 991.2 y el triple que el 911 GT3 actual. Así, a 285 km/h, que es su velocidad máxima, esa carga es de 860 kilos.

El enorme alerón trasero, que se divide en dos partes, es esencial para aumentar la estabilidad a alta velocidad.

Además, este 911 tiene un sistema de reducción de la carga aerodinámica como los monoplazas de la Fórmula 1. Este DRS llega por primera vez a un Porsche de producción.

Por supuesto, para poder desempeñarse eficazmente en los circuitos, uno de sus escenarios predilectos, este GT3 RS tiene, además de vías ensanchadas, muchos elementos de sus subchasis diseñados para colaborar con la aerodinámica de la carrocería. Además, la suspensión es ajustable tanto en extensión como en compresión y el control de tracción admite hasta siete modos de funcionamiento. Todo desde el puesto de conducción, lo que hace también distinto a esta versión de las anteriores. Además, tiene discos de freno cerámicos y la posibilidad de incorporar llantas de magnesio o barras estabilizadoras y elementos de las suspensiones construidos en fibra de carbono para reducir aún más el peso.

Desde el puesto de conducción es posible regular buena parte de los elementos del chasis, para adaptar así su funcionamiento a diferentes situaciones.

Este es de 1.450 kilos, similar al del GT3, lo que resulta extremadamente meritorio si tenemos en cuenta añadidos como el alerón trasero, los elementos aerodinámicos activos, etc. En parte se consigue con cristales más finos y, también, porque la fibra de carbono es el elemento constructivo de techo, puertas, capó y muchos más elementos de serie.

Son de serie en este RS los baquets con arneses de seis puntos, la jaula antivuelco, los extintores...

En cuanto al motor, esta versión del 911 para la que ya se aceptan pedidos y que costará 265.404 euros, dispondrá del cuatro litros atmosférico de gasolina, como el GT3, un motor que en esta versión RS gana 15 CV gracias a un nuevo árbol de levas. Así su potencia es de 525 CV que son entregados al eje trasero a través de una caja de cambios de doble embrague PDK de siete marchas. Gracias a él, el GT3 RS es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 3,2 s y alcanzar una velocidad de 296 km/h.