Actualización para el Mazda CX-5, un SUV de 4,58 m de largo, con muchos pequeños cambios respecto a la segunda generación lanzada cinco años atrás. Es el caso de la parrilla, faros que pueden ser hasta adaptativos o en el interior con nuevos asientos, inserciones o un mejorado sistema de infoentretenimiento con pantalla de 10,25”, que sigue sin ser táctil -se maneja desde un mando entre los dos asientos delanteros-, pero que Mazda afirma que es más rápido, compatible con Apple CarPlay y Android Auto o la visión de la cámara perimetral.

A los acabados Origin, Evolution y Zenith se suman el Newground, Signature y Homura, por este orden, de aspecto más campero, elegante o deportivo.

El Newground es uno de los nuevos acabados. La familia del CX-5 la componen nada menos que 42 combinaciones de motores, cambios, tipos de tracción y niveles de dotación.

Los motores de gasolina son el 2.0 Skyactiv-G de 165 CV y que se puede asociar a una caja manual o una automática, las dos de seis velocidades; y un 2.5 Skyactiv-G de 194 CV, éste exclusivamente ligado al segundo pero que, a diferencia del primero de los dos sólo es de tracción delantera, puede ser también de tracción total.

En cuanto a las motorizaciones Diesel, el 2.2 Skyactiv-D está disponible con dos niveles de potencia, 150 y 184 CV y, como el de gasolina, con tracción delantera en el primer caso y, adicionalmente, total en el segundo. Lo que no existe es la posibilidad de contar en el 150 CV con la caja automática de cambios, como sí ocurría con el de menor potencia de gasolina; que es la única alternativa en el de 184 CV.

Las novedades son de menor entidad en el interior que en el aspecto exterior. Mazda presume de una calidad por encima de la media en todos sus coches.

Mazda ha incorporado cambios tanto en la suspensión como estructurales, en este caso con la intención de reducir vibraciones que produzcan ruidos indeseables provenientes de la rodadura.

También en cuanto a ayudas a la conducción, con un nuevo Asistente de Tráfico y Crucero. Este CTS aporta asistencia al acelerador, freno y dirección en situaciones de tráfico intenso y ajusta la velocidad al vehículo precedente. Hasta a 55 km/h también incluye la asistencia a la dirección hasta en curvas.

Las ayudas a la conducción son uno de los puntos fuertes de este SUV de Mazda.

La dotación en este sentido es amplia ya que, de serie, todos los Mazda CX-5 incorporan el Sistema de Asistencia a la frenada en ciudad avanzado con cámara de visión delantera, el de Alerta de cambio involuntario de carril, el Control de ángulo muerto con detector de trafico trasero o el Control de velocidad de adaptativo.

El precio de partida es de 30.900 euros, que es lo que cuesta el 2.0 de 165 CV combinado con el acabado Origin. El salto al nivel Evolution supone 1.400 euros y de éste al Newground hay 1.100 euros. El siguiente, hasta el Zenith, exige pagar 900 euros como mínimo respecto a ese nuevo Newgroud -hay distintas posibilidades en función de la definición precisa con los Pack Bose, 1.600 euros; o Cuero, de 2.100 a 2.300-  y llegar al Homura supone un desembolso de 36.100 euros: esto son 1.800 euros más que el más asequible de los Zenith. El nivel Signature es 1.200 euros más costoso que el Zenith que también lo es, por tanto, con cuero. En cuanto al cambio automático cuesta 2.800 euros.

Los precios de arranque en gasolina son, en el caso del motor de 165 CV, 30.900 euros; en el del 194 CV, de 39.700 euros.

El motor de gasolina de 194 CV, que no dispone de los acabados Origin y Evolution, arranca su oferta en el Newground con un precio de tarifa de 39.700 euros. El resto son Zenith, Homura y Signature. Sumar la tracción total en lugar de la delantera exige el pago de 3.000 euros adicionales.

En cuanto a los Diesel, el menos potente sale por 33.900 euros, que es lo que cuesta el acabado Origin. Este de 150 CV, al igual que ocurre con el de 184 CV, tiene las mismas combinaciones de niveles de equipamiento que el de 165 CV de gasolina en el caso de las versiones de tracción delantera, mientras que con la total arranca en el acabado Newground, como el de 194 CV.

La tracción total, en mayor medida; y el cambio automático, en menor, serán residuales en la configuración de estos CX-5, según Mazda.

El Skyactiv-D de 184 CV tiene un precio de 37.700 euros en el caso de la combinación de tracción delantera y acabado Origin. En este, como en resto de casos, hay una campaña base de Mazda que descuenta 1.500 euros y a los que se pueden sumar 509 euros con los planes Promofinance o 1.000 euros con el Flexiopcion.

Según Mazda, espera vender más gasolina que Diesel, con abrumadora diferencia para los primeros motores, más unidades con cambio manual que automático y una residual cantidad de CX-5 con tracción total frente a la delantera.