El Kremlin tachó este martes de "inevitable" un conflicto directo con la OTAN si los países aliados despliegan tropas en Ucrania, tal y como sugirió la víspera el presidente francés, Emmanuel Macron.

"En ese caso hablamos ya no de la posibilidad, sino del carácter inevitable (del conflicto con la OTAN)", señaló durante su rueda de prensa telefónica diaria el portavoz de la Presidencia rusa, Dmitri Peskov.

Según Peskov, los países de la Alianza Atlántica deben "valorar" si el conflicto con Rusia "corresponde a sus intereses y los intereses de sus pueblos".

Macron afirmó el lunes que "la derrota de Rusia es indispensable para la seguridad y la estabilidad de Europa".

Agregó que, aunque "no hay consenso hoy" para enviar tropas terrestres, advirtió que nada puede excluirse en el futuro y puso como ejemplo que hace dos años nadie pensaba en enviar aviones de combate a Ucrania.

El presidente francés consideró que frente al incremento de la agresividad rusa, tanto en suelo ucraniano como contra el resto de los aliados europeos, "no se puede esperar" a dar una respuesta y asumió una "ambigüedad medida" sobre el envío de tropas.

El Kremlin asegura desde hace meses que en Ucrania no combate sólo contra el Ejército del país vecino, sino contra la máquina de guerra de la OTAN.

En particular, el presidente ruso, Vladimir Putin, acusa a Estados Unidos de alargar artificialmente el conflicto al suministrar armamento pesado a Kiev con el fin de lograr "la derrota estratégica de Rusia".

Avance en suelo ucraniano

Por su parte, el Ejército ruso continúa avanzando en Ucrania tras la toma del bastión de Avdivka y ha ocupado más de 300 kilómetros cuadrados de territorio ucraniano en lo que va de año, informó este martes el ministro de Defensa, Sergei Shoigu, en una reunión con la plana mayor de las Fuerzas Armadas.

"Tras establecer el control sobre el importante bastión enemigo de Avdivka, las fuerzas rusas continúan mejorando sus posiciones en los sectores de Donetsk y Kupiansk, toman nuevas alturas y posiciones del Ejército ucraniano. Desde el comienzo del año han sido liberados de las fuerzas nazis 327 kilómetros", indicó.

Según Shoigu, en la última semana el Ejército ruso expulsó a las fuerzas ucranianas de las localidades Pobeda, Lastochkine y Severne de la región de Donetsk, anexionada por Rusia en septiembre de 2022.

"A consecuencia de las intensas y decididas acciones de nuestros militares, se reduce el potencial bélico de las Fuerzas Armadas de Ucrania. El enemigo pierde a diario desde comienzos de año un promedio de 800 efectivos y 120 máquinas de combate, incluyendo las de fabricación extranjera", añadió.

El ministro de Defensa ruso cifró en más 444.000 las bajas ucranianas en lo que va de guerra, pocos días después de que el presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, cifrara en 31.000 el número de militares ucranianos muertos en la guerra.

"Tras el fracaso de la contraofensiva, la comandancia del Ejército ucraniano intenta estabilizar la situación por medio del envío de las reservas restantes para evitar el colapso del frente", dijo Shoigu, al señalar que Rusia destruye con armas de "alta precisión y largo alcance" estas reservas en la retaguardia ucraniana.