El número 6 de la sevillana calle Acetres, donde nació y pasó su infancia Luis Cernuda, podrá ser un centro dedicado a la vida y obra del aclamado autor de Ocnos, a la literatura y la poesía. El Ayuntamiento ha confirmado a este medio que se ha salvado ya el principal escollo que impedía la operación de compra, las deudas que mantenían con la Hacienda municipal algunos de los 19 propietarios del inmueble, asunto que enquistaba y técnicamente imposibilitaba la operación, según estas fuentes.

Como ya publicó Diario de Sevilla, en los presupuestos municipales de 2019 había prevista una partida suficiente para hacer frente a la compra de la casa de Cernuda para darle un uso cultural. El equipo del alcalde Juan Espadas (PSOE) inició las negociaciones con la familia propietaria una vez que la Junta de Andalucía declaró como Bien de Interés Cultural (BIC) este inmueble de tres plantas donde Cernuda nació el 21 de septiembre de 1902.

"En estos momentos se está montando el expediente de adquisición del edificio ubicado en el número 6 de la calle Acetres, tras solucionar la familia vendedora los pagos con la Hacienda y la Seguridad Social, y esperamos que en un par de meses la escritura pueda estar en manos del Ayuntamiento", ha detallado a este medio el delegado municipal de Cultura, Antonio Muñoz, responsable también de Turismo y Hábitat Urbano.

Se han iniciado contactos para valorar la intervención arquitectónica y usos culturales de la finca

Por lo tanto, el siguiente paso es de índole interna: el Ayuntamiento deberá realizar los expedientes y trámites necesarios para adquirir una casa por cuya salvaguarda se han movilizado distintos colectivos culturales y sociales de la ciudad. Para ello, se han iniciado ya contactos con expertos que permitirán definir los usos culturales y el proyecto de intervención arquitectónica necesarios para salvar el edificio de la ruina y dotar a Sevilla de un centro que ponga en valor el legado de uno de los miembros más destacados de la Generación del 27.

El Ayuntamiento estimó que la cifra por la que se podría adquirir el edificio a los propietarios, que habían pedido una suma superior en el mercado inmobiliario, era de 400.000 euros.

De culminarse con éxito la operación de compra -que precisará del apoyo de los grupos de la oposición municipal en el contexto de las próximas elecciones- se daría un vuelco en positivo a la tortuosa relación de Sevilla con Luis Cernuda, cuya tumba está en la capital de México, donde falleció en 1963 durante su exilio. A finales de diciembre la casa Durán subastó en Madrid el legado del escritor y entre los lotes destacaban primeras ediciones autoeditadas de sus obras, retratos que le hizo el pintor Ramón Gaya así como su variada colección de discos y su gramófono. El Estado compró las piezas más valiosas ejerciendo su derecho de tanteo.