Danza aérea, equilibrios y 'break dance' en la calle

FeSt. Laura Bolón(Argentina-Andalucía). Dirección: Lucio Cerdá. Intérprete: Laura Bolón. Música: Raúl Cantizano. Coreografía: Cecilia Gómez y Laura Bolón. Vestuario: Marina Suárez y Laura Bolón. La Corcoles(Cataluña). Creación y dirección: Andrés Melero. Intérprete: Mariona Moya. Escenografía: Andrés Melero y Mariona Moya. Circle of Trust (Aragón). Intérpretes: Alberto Pardo, Marcos Pardo, Andrían Morena, Juan Manuel Aragón y Víctor Lázaro. Lugar: La Alameda de Hércules. Fecha: Domingo, 16 de octubre de 2011. Aforo: Completo.

El teatro de calle ha tenido un especial protagonismo en la tercera jornada del Festival escénico contemporáneo de Sevilla. Tres espectáculos ubicados en la Alameda de Hércules fueron programados en horario de mañana y tarde aglutinando a más de 300 personas entre los que no faltaban los niños.

Cronológicamente, la primera actuación, Inmujerable, correspondió a la argentina afincada en Málaga Laura Bolón.

Danza aérea en tela y trapecio para un espectáculo lleno de contenido que reinvindica a la mujer a través de un ejercicio poético combinado con la técnica más depurada en sus juegos acrobáticos.

Laura Bolón se convierte en en todas las mujeres: madres, románticas, despechadas y, también, valientes. Precioso ejercicio que combina la danza y la acrobacia extrema haciendo del circo un elegante vehículo para transmitir un mensaje de solidaridad y amor hacía las mujeres.

La producción de la catalana Mariona Moya, Gris, es un cuento íntimo precioso sobre la soledad simbolizada en un pez. Dirigido por Andrés Melero, la unión de la danza-teatro, gesto y funambulismo consiguen un delicadísimo espectáculo que te llega al corazón.

Mariona Moya está llena de expresividad convirtiéndose en un ser entrañable con el que nos sentimos indentificados. Une a su aparente fragilidad una impecable sabiduría en la técnica del funambulismo.

La tercera propuesta estuvo a cargo de los aragoneses Circle of Trust, bailarines de break dance que elevaron, aún más, el ánimo de un público que acompañó con palmas las evoluciones de estos acróbatas que derrocharon una increíble fortaleza física.