Más del 80% de los contribuyentes andaluces -aquellos cuyo tramo de renta es de hasta 45.000 euros en las declaraciones individuales y de 55.000 euros en las conjuntas, unos 3,5 millones de personas- podrán beneficiarse de la futura ley de mecenazgo de la comunidad, cuyo anteproyecto recibió ayer luz verde en el Consejo de Gobierno. Crear deducciones fiscales al consumo y fórmulas de micromecenazgo son algunas de las novedades de la futura Ley de Estímulo de la Actividad Cultural, "que ampliará las posibilidades de financiación del sector más allá de las ayudas públicas", según el titular de Cultura, Luciano Alonso.

Entre las principales novedades, los consumidores de bienes culturales podrán desgravarse, en el tramo autonómico del IRPF, el 15% del dinero destinado (hasta un límite de 240 euros) a la compra de libros y obras de arte, o de entradas de teatro, cine, conciertos y exposiciones. La Junta considera que esta fórmula es especialmente necesaria por el agravamiento que para el sector cultural, aquejado por la crisis, ha supuesto la reciente subida del IVA cultural (del 8% al 21%). España es el único estado de la Unión Europea que no cuenta con reducción de este impuesto en el ámbito cultural.

Otra novedad de la futura norma, que cubrirá las lagunas de la vigente Ley 49/2002, de Régimen Fiscal de las Entidades sin Fines Lucrativos y de Incentivos Fiscales al Mecenazgo, es la deducción a que tendrá derecho el contribuyente por la realización de donaciones a fundaciones y consorcios con fines de interés cultural, que será también del 15% con un límite de 240 euros. La misma desgravación se establece en relación a las entidades del sector con ánimo de lucro. "El micromecenazgo encontrará en la futura norma su soporte legal", recalcó Alonso, que también destacó la ampliación de las vías para financiar la mejora del patrimonio histórico. Así, habrá bonificaciones del 15% para donaciones de terceros destinadas a bienes de interés cultural de titularidad autonómica y a las inversiones de los propios propietarios.

En cuanto a las modificaciones en el Impuesto de Sucesiones y Transmisiones, se reducirán las cargas por la transmisión de empresas o negocios de carácter cultural al rebajarse al mínimo la tributación por estos conceptos, con una reducción del 99,99% de la base imponible para las empresas cuyos fondos propios sean inferiores a 200.000 euros. Y en lo referente al impuesto sobre transmisiones patrimoniales y actos jurídicos documentados se fijarán tipos de gravamen reducido para las transmisiones de bienes del Catálogo General del Patrimonio Histórico Andaluz que vayan a ser incorporados a empresas, actividades o proyectos de carácter cultural (3,5% en el caso de muebles y 6% en inmuebles), así como para los actos notariales que las documenten (0,3%).

El anteproyecto de ley, que según el consejero de Cultura se remitirá al Parlamento a finales de este año y podría aprobarse en el primer trimestre de 2014, se completa con diversas disposiciones que quieren favorecer la participación ciudadana y la colaboración público-privada. Entre ellas, se creará una tasa para el uso especial de los edificios culturales de la Junta (museos, enclaves, archivos, etc.), que podrán ser usados para actos sociales, institucionales o privados "salvaguardando los horarios de atención al público".