El director Zubin Mehta se reencontrará con Granada 43 años después de que lo hiciera en 1968 y lo hará para la jornada inaugural de la sexagésima edición del Festival Internacional de Música y Danza. "Todavía lo recuerdo como si fuese ayer", dijo el director indio. En aquella ocasión, asistió al concierto en el Palacio de Carlos V la entonces princesa Sofía. Esta noche estará también presente en el palco. Será una jornada de auténtico esplendor.

Mehta dirige a la Orquesta de la Comunitat Valenciana, al Cor de la Generalitat Valenciana, al Coro de la Presentación y la mezzosoprano Christianne Stotijn en la Sinfonía número 3 en Re menor, de Gustav Mahler, una sinfonía que Mehta calificó como su favorita. "Abre todo mi corazón", señaló. "Es una obra muy positiva, dedicada a la naturaleza. La primera vez que la ensayamos con la orquesta, muchos músicos tenían lágrimas en los ojos. Esa obra era un descubrimiento para ellos. Nunca había visto antes a una orquesta tan emocionada interpretando una composición".

Mehta lleva trabajando con la orquesta valenciana desde 2006. "Después de casi seis años juntos, sé que ahora es una orquesta extremadamente experimentada. Tenemos unos solistas que son comparables con los mejores solistas del mundo".

Mehta narró que Mahler interpretó al piano esta sinfonía para animar a los directores a llevarla al escenario, pero ninguno quería. Finalmente, invitó a Bruno Walter a su casa de verano en Austria. Cuando el director llegó a la estación de trenes, se quedó asombrado por la maravilla del paisaje. "No te preocupes", le dijo Mahler. "Todos esos paisajes están en mi música".

Mehta señaló que su romance con España comenzó en 1964. "Fui la primera vez que toqué aquí". Luego lo hizo en Granada, en 1968, en una noche que todavía recuerda. "Después del concierto, la princesa Sofía, la embajadora de la India en España y yo nos fuimos al Sacromonte para que ellas bailaran".

"El festival de Granada es único en el mundo", dijo en alusión al simbolismo de la convivencia de las tres culturas. El director manifestó su disposición a participar en algún espectáculo que resaltara esa convivencia como ya hizo en Toledo con Plácido Domingo para recordar los 500 años de la expulsión de los judíos.

Zubin Mehta defendió también que la cultura debe seguir potenciándose incluso en épocas de crisis como la actual. "La música clásica es algo que nunca muere, es algo que nos mantiene vivos y en movimiento. Y no sólo la música, sino todas las Bellas Artes".

El director dejó la diplomacia a un lado para arremeter contra la actual política cultural española y la comparó con Italia. "Berlusconi hace recortes continuos en el mundo de la cultura", señaló. "La diferencia con España es que aquí hay gobiernos autonómicos y es el Gobierno central el que permite que se hagan esos recortes. No entiendo que las distintas autonomías reciban distintos niveles de subvenciones dependiendo del partido que las gobierne. Eso es inaceptable", señaló, haciendo hincapié que mientras este año la Generalitat de Cataluña ha recibido 17 millones de euros, la de Valencia sólo ha recibido uno.