Cultura

Siete días con Turina gracias al patrocinio privado

  • La cuarta edición del Festival Internacional de Música de Cámara Joaquín Turina ofrece del lunes al domingo próximos 75 horas de clases magistrales y 11 conciertos en diversos escenarios

Joaquín Turina nació en Sevilla el 9 de enero de 1882. Sin embargo, numerosos aspectos de su legado, como su archivo personal y sus fondos fotográficos (depositados por su familia en la Fundación Juan March) se conservan en Madrid, la ciudad a la que se trasladó con 20 años, donde se consagró musicalmente y falleció en 1949. Cualquier tentativa seria y rigurosa de celebrar su obra y su talento en su ciudad natal debería ser un reclamo cultural y turístico que atrajera la atención pública. Pese a ello, la cuarta edición del Festival Internacional de música de cámara que lleva su nombre ha salido adelante gracias al apoyo ciudadano y de las pequeñas y medianas empresas de Sevilla que, a través del mecenazgo privado, en un asombroso ejercicio de gestión cultural, han ofrecido 29.400 euros de los 30.000 que el proyecto necesitaba simplemente para existir. Pese al tímido apoyo oficial -el ICAS colabora finalmente aportando la cartelería y los programas de mano pero no con una partida económica directa- esta cita, que tiene como directora artística a la animosa pianista noruega afincada en Sevilla Benedicte Palko, ofrecerá 11 conciertos del próximo lunes 9 al domingo 15, y abrirá a los aficionados los ensayos generales y las clases magistrales, así como varios espacios singulares de la ciudad que aportan su sede al festival y entre los cuales debuta este año el Pabellón de Portugal.  

Quince artistas de gran proyección procedentes de España, Rusia, Reino Unido, Noruega, Alemania, Hungría, Armenia, Francia y Suecia serán los responsables de lograr, en encuentros inéditos, "ese sonido profundo y emotivo" que Palko quiere obtener con un "repertorio cálido", atento a piezas de difícil ejecución o poco interpretadas, donde Turina comparte atril con autores como Beethoven, Stravinsky o Britten. 

Una heroica lista de patrocinadores privados (6), 17 colaboradores, 8 proveedores y 52 amigos y mecenas, algunos captados a través del crowdfunding -donde se mantiene la iniciativa #YoapoyoTurina para reunir los 1.000 euros que restan para contratar al luthier- han secundado la apuesta de un festival que tiene su pilar en la formación y los jóvenes, a los que ofrece 75 horas de clases magistrales. 47 alumnos de diversos países europeos y de Japón, además de estudiar con los profesores y solistas invitados, protagonizarán los tres primeros días gracias al Ciclo de Jóvenes, que acoge la Fundación Cajasol (principal patrocinador del evento) en su sede de la calle Laraña. Allí también, el miércoles a las 20:30, el programa Todo Bartók acercará las obras completas para violín y piano del compositor húngaro.

El jueves, la Casa Salinas, en Mateos Gago, acogerá a las 19:30 el concierto inaugural del Festival, donde además de disfrutarse obras de Turina y Dvorák, el Quinteto Ethos -una formación andaluza que está logrando numerosos reconocimientos- ofrecerá con Sofya Melikyan el Sexteto para piano y quinteto de viento de Poulenc.

El viernes, en la Fundación Cajasol, un intenso programa permitirá escuchar desde las 19:30, junto a obras de Stravinsky y Prokofiev, la Sonata Española de Turina para violín y piano, que estará a cargo de Graf Mourja y Peter Nagy, y el Trío para violín, cello y piano del compositor armenio Arno Badadjanian, inédito en Sevilla, y que interpretarán sus compatriotas Mikayel Hakhnazaryan (cello) y Sofya Melikyan ( piano).

El sábado 14, la Matinée con la Orquesta de cuerda y jóvenes músicos del Festival ofrecerá obras de Ginastera y Ravel antes de las Variaciones sobre un tema de Frank Bridge de Benjamin Britten, que se estrena en Sevilla gracias al patrocinio de la academia de idiomas ELI, que ha costeado el alquiler de la partitura, y con la que el festival se suma al centenario del compositor inglés. De Turina se interpretará en dicha Matinée su Rapsodia Sinfónica nº 66, gracias al patrocinio para el alquiler de la partitura de la joven empresa sevillana Vidot, dedicada a la fabricación artesanal de objetos con piel de toro.

Ese mismo sábado a las 20:30 en el Consulado de Portugal se interpretarán piezas de Paul Hindemith, Brahms y el difícil Septimino de Beethoven (único programa que no cuenta con obras de Turina).  

El concierto de clausura será en la Capitanía General e incluye el Sexteto para cuerda, viento y piano de Ernö Dohnanyi y, cómo no, el Cuarteto para cuerda y piano en la menor, op. 67 de Joaquín Turina.

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