El festival 'Aracena Blues' consolida su identidad con una quinta edición que aspira a dejar huella
5º ARACENA BLUES
Del 31 de julio al 2 de agosto, Aracena volverá a llenarse de música con su festival de blues, que une a artistas de primera línea y a toda una comunidad volcada con el ritmo. Presentado en Sevilla, Aracena Blues celebra ya su quinta edición como un puente cultural entre la capital hispalense y la sierra onubense
Así es el festival gratuito que se celebra en un escenario único del siglo XI

Pocas dudas traerá consigo la afirmación de que Quique Bonal y Kid Carlos son los mejores guitarristas de blues de Huelva y Sevilla, respectivamente -por supuesto, con permiso de Lolo Ortega-, y por eso ellos han puesto con un magnífico concierto el broche de oro a la presentación del festival Aracena Blues, que en este año de 2025 llega a su 5ª edición. Este festival tiene mucho que ver con las dos provincias mencionadas, porque está organizado por el Ayuntamiento de Aracena y cuenta con Cruzcampo como patrocinador principal, por eso esta presentación a los medios de nuestra capital se ha celebrado hoy en Torre Cruzcampo, contando con la participación de Manuel Guerra, alcalde de la localidad serrana, que ha hecho hincapié en la afinidad de nuestros dos municipios hablando de cómo la gente de Sevilla históricamente se iba a pasar el verano a Aracena, “el municipio que tiene más arquitectura de alguien tan emblemático y tan representativo como Aníbal González, después de la capital hispalense”, según nos informó en su intervención.
Con el entusiasmo de quien construye una historia desde el afecto y la voluntad, este festival de blues nació en tiempos de pandemia y mascarillas, gestado por un puñado de entusiastas, representados hoy aquí por Babé Gómez, Carlos Sabido y el propio Quique Bonal -solo hemos echado en falta a Ana Torres, otro de sus pilares fundamentales, concejala de cultura del consistorio aracenense, a la que unos problemas personales le han impedido asistir- que han hecho de esta presentación una celebración coral y un acto de agradecimiento y memoria compartida. Gómez y Sabido fueron los primeros en hacer uso de la palabra y entre anécdotas y menciones personales a los colaboradores, a la familia, a los que diseñan los carteles o ceden sus espacios -como el Hotel Barceló, donde se desarrollará la noche de inicio-, dibujaron el mapa emocional del festival y cómo se ha levantado con mimo y espíritu de comunidad. La Casa del Blues, los voluntarios, los hoteleros, los músicos locales y foráneos, todos forman parte del engranaje invisible que hace que cada verano Aracena se vista de acordes y noches estrelladas.
Aracena tiene el título de 'muy culta ciudad', y tenemos la obligación de hacer que eso no sea solo un título honorífico, sino que sea realmente una actitud ante la vida"
Después de que Bonal desgranase la nómina de artistas participantes en el festival, a la que me referiré en otros párrafos posteriores, el alcalde Guerra nos brindó una lúcida y amena intervención en la que resaltó la importancia de que “en la sociedad civil surjan iniciativas como esta y además haya compromiso social para llevarlas a cabo, algo que para la administración es una obligación”. A lo que añadió con orgullo que “Aracena tiene el título, y así consta, de muy culta ciudad, y tenemos la obligación añadida de hacer que eso no sea solo un título honorífico, sino que sea realmente una actitud ante la vida y un compromiso con el conjunto de nuestra sociedad”. De ahí la amplísima programación cultural de Aracena a lo largo de todo el año, con actividades de muy diverso tipo prácticamente todas las semanas, especialmente en lo que se refiere a música. “Precisamente la semana siguiente a este festival de blues se celebrará en la iglesia del Castillo de Aracena una muestra de música antigua”.
La música se funde con el entorno. El alcalde recalcó el enorme patrimonio histórico y natural que tiene Aracena y cómo el festival de blues es “una forma de proyectar la identidad del municipio y abrirlo al mundo con autenticidad y belleza”. En sus palabras, Aracena no solo acoge, sino que se implica: "tenemos la infraestructura, la historia, y sobre todo, las personas que hacen que este festival tenga alma".
Las fechas de celebración son el 31 de julio y los días 1 y 2 de agosto. El cartel condensa el espíritu del festival, cercano, festivo, luminoso, con los participantes que Bonal fue desgranando. La primera noche tendrá lugar en el Hotel Barceló, con una masterclass, una charla coloquio y una jam sessión final en la que podrán participar todos los músicos y cantantes que se hallen presentes en el cóctel de bienvenida. El viernes, día 1, en la plaza de toros tendrán lugar tres conciertos, el primero de ellos a cargo de Max Biondi Blue Experience, un grupo italiano, pero que cuenta con un bajista, Manu García, natural precisamente de Aracena; un músico muy joven, representativo de las nuevas generaciones. A Contra Blues, el segundo grupo, es de Barcelona y viene avalado por su primer premio en el European Blues Challenge de 2014; un quinteto en cuya música conviven la tradición y la heterodoxia, en un repertorio que aúna los clásicos del blues con la música americana. Y la noche la cerrará la banda de Alex Schultz, “uno de mis guitarristas favoritos de siempre, del que he aprendido mucho”, confesó Bonal, “que trae en su banda a una cantante estupenda, Gisele Jackson, que ha sido corista de Ray Charles y Donna Summer”.

La jornada del sábado, día 2, comenzará a mediodía en la Plaza de San Pedro, junto a la Gruta de las Maravillas, en la que la Casa del Blues de Sevilla organizará una jam sessión después del concierto gratuito que patrocinan de Lolo Ortega y su banda. Por la noche el ambiente se traslada de nuevo a la plaza de toros donde abrirá la velada Kamikaze Helmets, un dúo madrileño de teclados y batería que se sale un poco de la norma musical imperante, pero que gustarán a todos porque son dos genios que han colaborado con artistas como Aurora & The Betrayers, Lisa & The Lips o las míticas Martha Reeves & The Vandellas. De San Sebastián llegarán Noah & The Helldrinkers, también ganadores en 2023 del European Blues Challenge, lo que les abrió las puertas al circuito de blues europeo. El festival lo cerrará Susan Santos, cantante y guitarrista de Badajoz, internacionalmente consolidada gracias a sus seis discos publicados y su reconocimiento en Europa y América.
Las entradas para todos los espectáculos están disponibles en la página web de Giglon, en tres modalidades distintas, que incluyen la opción para las noches individuales en la plaza de toros y el abono, con gran descuento, para todos los conciertos del festival.
El Aracena Blues es un puente tendido entre Sevilla y Huelva, una celebración del afecto compartido y del poder de la música para tejer comunidad. Desde la sierra hasta la capital, el blues recorre caminos antiguos con alma nueva, y cada verano convierte a Aracena en un lugar donde las guitarras hablan el mismo idioma que la tierra.
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