Quiere usted aprender cirugía laparoscópica? Sí.

-Pues la única condición es que hasta que usted sea capaz de hacerlo exactamente igual que yo, aquí, sólo pienso yo.

Y lo acepté a la primera y sin un solo comentario.

Imaginen la escena en un hospital de la provincia de Cádiz entre un gran profesor de la Universidad de Sevilla y además jefe de departamento del hospital más grande de Andalucía y un joven cirujano de provincias de treinta y seis años.

Ese día me conquistó Don Tomás. Me dio una respuesta humilde, inteligente y sincera.

Comenzamos a trabajar juntos en el desarrollo e implantación de la cirugía laparoscópica en Andalucía. Puedo decir que fue el primer Gran Patrón de la cirugía española que se metió de lleno en este menester.

Se ocupó de que en su hospital todos supieran operar mediante esta innovadora técnica y bajo su protección y estímulo llevamos la nueva forma de operar a los hospitales comarcales de Andalucía.

Durante trece años organizamos juntos en El Puerto de Santa María el curso internacional de cirugía laparoscópica, curso al que venían los mejores espadas de Europa para disfrute de los cirujanos españoles. Disfrutaba mucho organizándolo y era muy exigente con la calidad de los ponentes. Tenía verdadera vocación docente.

Conocía muy bien a las personas y como funcionaban. Rara vez se equivocaba. Emitía sus juicios con humor y gracia.

Don Tomás era una persona sentimental y cariñosa a pesar de su imponente fachada.

Aprendí mucho de él en múltiples campos del conocimiento y de la vida.

Hemos perdido un gran maestro al que espero reencontrar en la otra vida.