La ventana

Luis Carlos Peris

lcperis@diariodesevilla.es

Espectáculo a la caída de cada tarde

Abundemos en cómo está cambiándonos las costumbres este tiempo de pandemia y crujir de dientes que nadie sabe cuándo va a terminar. Poníamos el acento días atrás en el cambio que van a experimentar los horarios, con la posibilidad de que, por ejemplo, cenemos a la misma hora que se cena en Berlín o en Amsterdam. Pero a esos usos hay que añadir el de las distracciones y viene al caso por lo que supone esa explosión de vida que surge cuando los niños salen de los colegios y los padres les dan manga ancha para que desfoguen en las plazas más cercanas. Gran espectáculo el que vemos a diario en lugares tan nuestros como son la Gavidia, San Lorenzo, la Alfalfa o la Alameda. Los bancos repletos de padres y de abuelos contemplando cómo la chiquillería juega aprovechando la única oferta de ocio que es posible a esa hora, preludio del obligado vámonos a casa.

MÁS ARTÍCULOS DE OPINIÓN Ir a la sección Opinión »

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios