CONVENDRÁ que nazca otro Castillo Lastrucci a fin de renovar la iconografía de nuestra Semana Santa. Hace unos años organizó este periódico una exposición de fotos con los personajes secundarios de la Pasión de Cristo. Había apóstoles, figuraba repetidamente María Magdalena, Simón de Cirene, José de Arimatea y así todos los que rodean a Jesús en la mayor ópera urbana de Occidente. Por supuesto que en esa muestra había inmensa mayoría de judíos en el papel de malos de la cosa con sus gestos mal encarados, de malvados que fueron los que mandaron a Cristo al Gólgota para ser crucificado. Bueno, pues que ha desvelado Benedicto XVI que de lo dicho, nada de nada. Después de veinte siglos en la creencia de que los judíos mataron a Jesús, su sucesor en la Tierra niega la mayor y sólo habrá que confiar en que no vaya a cargarse la Semana Santa, pues sería una putada muy gorda.