EL Íbex 35 perdió ayer un 2,85% al cierre de sesión y protagonizó su mayor caída desde finales de febrero, lo que llevó al selectivo a ceder la cota de los 8.800 puntos. El selectivo lideró los recortes en Europa y sumó cuatro sesiones consecutivas en rojo. Las pérdidas anuales del índice español aumentaron al 8,17%.

Todos los valores se adentraron en terreno negativo. La banca se convirtió en el principal lastre del selectivo, que partirá hoy desde los 8.764 enteros, su menor nivel desde el 12 de abril.

Precisamente, Caixabank experimentó ayer el mayor recorte, al caer un 5,3%, seguido de Sacyr y Bankia, que perdieron un 5,3% y un 5,2%, respectivamente. Mapfre cayó un 4,9% y Banco Santander un 4,8%, completando el top five de los descensos.

Banco Popular, Repsol y Arcelormittal se dejaron más de un 4%. Entre el resto de blue chips, BBVA cedió un 3,8%, mientras que Telefónica e Inditex redujeron su desplome al 2,7% y al 2,4%, respectivamente. Bankinter también despuntó entre las diez mayores caídas, al anotarse un descenso del 3,2%.

En una jornada negra para los principales parqués de Europa, el Íbex encabezó la tendencia bajista. Milán se anotó también una caída superior al 2%, mientras que París y Fráncfort perdieron entre un 1,5% y un 2%. Londres se dejó menos de un 1%.

En el mercado de deuda pública, la prima de riesgo española se mantuvo al alza y subió hasta el entorno de los 136 puntos básicos. El euro, por su parte, perdió posiciones respecto al dólar y la moneda única europea se intercambió por 1,1509 billetes verdes al cierre de la sesión.

En el Mercado Continuo, Urbas destacó al perder el 8,33% y Ercros al subir el 7,66% en una jornada en la que la bolsa negoció más de 3.300 millones.