PUEDE darse por seguro que habrá fútbol de Primera División en el mediodía del domingo y mañana podemos empezar a salir de dudas al respecto. Está previsto que en este segundo lunes de agosto se hagan públicos los horarios de la jornada inicial con permiso de esa AFE que no desacelera en su afán de amagar con huelga. También habrá partido el lunes por la noche, lo que hará que la jornada se juegue en un abanico horario de 48 horas. Y no sé, pero me da en la pituitaria que esa fecha, la del lunes, está destinada a equipos sin compromisos europeos, por lo que mucho me temo que el lunes y el Betis se den la mano más de una vez.

También se puede poner la mano en el fuego, aun sin descartar el lunes, que el derbi va a celebrarse el domingo 21, pues el Sevilla juega el jueves por delante y el jueves por detrás de esa fecha. Pero el caso que más susceptibilidades va a levantar es el de las doce en todos los relojes del mediodía dominguero. La idea, aún no hecha pública, es que ese partido sea del Madrid o del Barça. Ya sabe usted, por los mercados asiáticos que tanto anhelan rentabilizar los dos colosos. Pero lo que se está tardando en desvelar es que siempre sería con el Madrid y el Barça de visitantes, nunca en el Bernabéu o en el Camp Nou, y que se fastidien el anfitrión de turno y su cuerpo social.

Son rumores con un marcado tinte de antesala de la noticia, pues ya se sabe que cada cosa que se maneja según las apetencias televisivas van en beneficio de Madrid y de Barça, que los demás bastante tienen al beneficiarse de las migajas que van cayendo de la gran mesa de este opíparo banquete que más bien parece merienda de negros. Jamás se dicta norma alguna por parte de Roures y sus cuates que perjudique a los dos gigantes y no cabe la menor duda de que jugar a mediodía no suele ser un buen reclamo para la taquilla. Mañana podremos entrever algo de lo que se trama, pero da la impresión de que a la plebe le tocará una vez más plegarse a los de siempre.