La Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) de Sevilla denunció ayer que algunos delitos relacionados con la seguridad vial son considerados como faltas de orden público por determinados juzgados de la Campiña.

"Ocurre ya con demasiada frecuencia que los agentes se encuentran con conductores que van cometiendo alguna infracción y, al indicarles que paren, éstos se dan a la fuga, muchas veces poniendo en peligro al resto de usuarios de la vía. En muchas ocasiones los agentes llegan a identificar y detener a estos desaprensivos, que son acusados de un delito contra la seguridad del tráfico", explicó la AUGC en un comunicado.

Sin embargo, cuando esos expedientes llegan al juzgado, "la calificación penal ha pasado de un delito contra la seguridad del trafico a una incomprensible falta contra el orden el publico, castigada en la mayoría de las veces con un desembolso monetario inferior a los 300 euros".

Para la asociación de guardias civiles, mayoritaria en el cuerpo con más de 1.000 asociados en Sevilla, "este tipo de hechos tienen dos resultados posteriores: por un lado, el lógico desánimo y desaliento de los guardias civiles que ven un día tras otro como su trabajo no tiene resultado. Y otro mucho más claro, el mensaje implícito que obtienen los desaprensivos, y es que saben que desobedecer a los agentes y darse a la fuga siempre les sale más rentable que obedecerlos".