Las toneladas de basura se acumulan de nuevo en las calles de El Coronil, como consecuencia de la huelga indefinida que pesa sobre el servicio de limpieza urbana, cuyos operarios se encuentran además de baja laboral con los consiguientes efectos sobre los servicios mínimos. Después de que el pasado 11 de febrero la empresa pública de Transformación Agraria (Tragsa) despejase de basura el municipio a cuenta del "riesgo sanitario" declarado por la Consejería de Salud y Bienestar Social, el Ayuntamiento gestiona que dicha empresa pública se haga cargo al menos de los servicios mínimos, pero lo cierto es que la basura sigue sumando toneladas y el conflicto parece lejos de su solución. 

El alcalde de El Coronil, Jerónimo Guerrero, y Diego Cañamero, líder del Sindicato Andaluz de Trabajadores (SAT), han informado de que, en efecto, la basura vuelve a crecer entre las calles de esta localidad de la Sierra Sur, dado que al margen de la limpieza integral protagonizada por Tragsa aquel 11 de febrero, las calles sólo han vivido en materia de limpieza el frustrado intento realizado por los operarios de una empresa contratada por el Consistorio para hacerse cargo de los servicios mínimos, aunque las movilizaciones del SAT motivaron que los operarios se retirasen sin haber acabado una sola jornada.

Serían, según Jerónimo Guerrero, entre "80 y cien" las toneladas de basura que se acumulan de nuevo en las calles de El Coronil esperando su recogida, toda vez que el Ayuntamiento negocia actualmente con la Delegación del Gobierno central en Andalucía y la Subdelegación del Gobierno que Tragsa, a través de una encomienda de gestión, asuma los servicios mínimos del paro técnico como consecuencia de la baja laboral que presentan cuatro de los cinco trabajadores públicos del servicio de limpieza urbana. El Juzgado mixto número cuatro de Utrera, entretanto, sigue adelante con las diligencias incoadas a cuenta de la denuncia promovida por el Gobierno municipal contra el sindicato sobre el supuesto incumplimiento de los servicios mínimos, pues las partes discrepan incluso en la interpretación de tales servicios mínimos.  

El alcalde, de cualquier modo, ha explicado este martes que ha solicitado nuevamente a la Consejería de Salud y Bienestar Social que declare la situación de "riesgo sanitario" en el municipio para desencadenar una nueva limpieza general de las calles, toda vez que para este miércoles habría sido convocada una concentración ciudadana al objeto de reclamar el fin del paro técnico.

Cañamero avisa del coste de la huelga

Diego Cañamero, de su lado, avisa de que la huelga se prolonga ya durante 50 días, extremo que atribuye a la negativa del alcalde a reactivar la bolsa de empleo asociada al servicio municipal de limpieza urbana, cuya anulación despertó inicialmente el conflicto. Cañamero esgrime que esta bolsa de empleo implica un coste anual de menos de 25.000 euros, mientras el Ayuntamiento ha gastado ya "25.000" euros en las actuaciones de Tragsa y ha dejado de ingresar "38.000" al anunciar que no cobraría el recibo de la basura a los vecinos a cuenta de la huelga.  

"Estas cifras son la demostración palpable de que al PSOE le da igual El Coronil y sólo quiere castigar al SAT. Detrás de esta maniobra está Griñán, que busca venganza política contra el SAT por convocar las ocupaciones de fincas que la Junta puso a la venta, por las marchas obreras de este verano y por muchas otras cosas", esgrime Cañamero, según el cual "no hay ningún obstáculo legal o técnico" para restituir la bolsa de empleo.