La liquidación del presupuesto de 2018 de la Diputación Provincial de Sevilla se cerrará, de nuevo, con un importante superávit que permitirá  llevar a cabo un plan de inversiones. Será la séptima edición ya del denominado Plan Supera, que contará esta vez con unos 52,8 millones de euros. 

De esa cantidad, 30 se destinarán a las obras que soliciten los ayuntamientos, a través de las distintas líneas, y otros 22,8 se reservarán para obras o actuaciones supramunicipales, como carreteras o mejoras del patrimonio propio de la institución. 

Así lo ha avanzado este lunes el presidente, Fernando Rodríguez Villalobos, quien ha urgido al Gobierno central para que autorice estas inversiones por decreto, ya que los Presupuestos Generales del Estado no han llegado a aprobarse.

Sin ello, el dinero debe ir a pagar deuda bancaria (la Diputación sevillana no tiene desde diciembre de 2017) o dejarse en los bancos. Villalobos ha reclamado, por otro lado, "sensibilidad" para que se permita destinar fondos no solo a inversiones, sino a planes de empleo, como demandan los ayuntamientos. 

Los préstamos a coste cero para ayuntamientos contarán con 70 millones

El presidente de la Diputación ha recordado además al Gobierno de Pedro Sánchez, que desde mañana estará en funciones, que debe aprobar la orden que autoriza el reparto de fondos del Plan de Fomento del Empleo Agrario (Pfoea, el antiguo PER), por la necesidad de que estas obras se ejecuten en verano y cuando no hay otras campañas agrícolas.

Ha sido en una rueda de prensa en la que que el presidente provincial ha hecho balance de gestión y ha recordado que, con casi 300 millones invertidos a final de 2019, éste ha sido "el mandato del Supera", que se ha podido gestionar porque la corporación cumple con la regla de gasto y la ley estabilidad presupuestaria, con el aval en este sentido de la Airef (Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal), que supervisa a las administraciones. 

La propuesta de este nuevo plan Supera se llevará a un próximo Pleno de la Diputación, para que los ayuntamientos comiencen a tramitarlo, aunque condicionado a ese decreto estatal. 

Por otro lado, la Diputación tiene previsto sacar este año otras dos convocatorias de los Fondos de Anticipos Extraordinarios Reintegrables (FEAR), con los que, a través del Opaef, los ayuntamientos pueden pedir préstamos a coste cero para cubrir problemas puntuales de tensiones de tesorería, refinanciar deudas bancarias, pagar sentencias judiciales o llevar a cabo inversiones. 

El montante será 70 millones de euros. La primera convocatoria se sacará en breve, para los ayuntamientos que ya han liquidado su presupuesto y aprobado el nuevo y cumplen los requisitos que exige la ley. Está previsto que en setiembre salga la segunda convocatoria para el resto.