El Ejército de EEUU reducirá su presencia en la base aérea de Morón de la Frontera. La disminución de militares norteamericanos en Sevilla se debe a una reorganización de las fuerzas destinadas a las operaciones en África, que ahora serán destinadas a la base italiana de Vicenza. Según una información publicada este martes por el diario El País, esta reestructuración supondrá la salida de España de hasta 850 marines y ocho aviones, en concreto seis V-22 Osprey y dos C-103J Super Hércules. Esto supone la más importante merma de la presencia militar estadounidense en España desde 1992, cuando salieron los últimos cazabombarderos F-16 de la base de Torrejón de Ardoz (Madrid).

El rotativo apunta a que se trata de una decisión del Pentágono, que responde meramente a cuestiones técnicas y operativas. Fuentes de la diplomacia española y norteamericana destacaron el buen estado que atraviesan las relaciones entre ambos países, como se pudo comprobar durante la crisis de la salida de Afganistán, cuando la base de Rota acogió a más de 2.000 refugiados que habían colaborado con el Ejército de EEUU y que fueron evacuados desde el aeropuerto de Kabul el pasado mes de agosto. En Morón se llegó a montar un dispositivo para acoger a al menos 700 colaboradores más, pero no fue finalmente necesario utilizar esos barracones. La noticia de la salida de los marines se ha conocido, además, poco después de la conversación mantenida entre los presidentes de ambos países, Joe Biden y Pedro Sánchez, en la cumbre del G-20.

Un portavoz de la Embajada de EEUU consideró este martes "vital" la relación "excepcionalmente estrecha" en materia de defensa que mantiene su país con España, pese al traslado de efectivos a Italia. Este representante diplomático recordó que la cooperación de los dos países "en apoyo de las misiones de la OTAN sigue siendo crítica", y dijo que Washington "mantiene firme" su compromiso de "mantener una presencia estadounidense en España, incluidas las fuerzas navales avanzadas desplegadas de en Rota".

Ejercicios de los marines americanos en Morón.

La presencia de los marines en Morón de la Frontera (y Arahal, término al que pertenece la mayor parte de la base) se incrementó notablemente en el año 2013. En abril de ese año, el Gobierno español autorizó el despliegue provisional de unos 500 infantes de marina y ocho aviones de las Fuerzas Armadas de EEUU. Se constituyó una unidad que se llamó Fuerza Especial Aire Tierra de Respuesta de Crisis del Cuerpo de Marines.

La razón de elegir la base sevillana era la ubicación estratégica de Morón para dirigir desde aquí las operaciones militares de las tropas norteamericanas en África. El aumento de la presencia militar americana en España fue la respuesta al ataque contra el consultado estadounidense en Benghasi (Libia), en el que fue asesinado el embajador, Chris Stevens, el 11 de septiembre de 2012. El Gobierno de Barack Obama quería tener un cuerpo de élite desplegado cerca de África, que pudiera organizar y poner en marcha operaciones de rescate o de castigo en pocas horas ante una posible crisis.

Unos meses más tarde, el 19 de abril, el Consejo de Ministros aprobó la solicitud de EEUU para la llegada de los marines a la base de Morón, unas instalaciones que pertenecen a España pero cuyo uso es compartido con el Ejército estadounidense, en base al Convenio de Cooperación para la Defensa firmado entre ambas naciones. En teoría la petición de los americanos tenía un año de duración, pero no sólo se fue prorrogando sino que se incrementó el número de marines en unos 350 más en los años siguientes. España autorizó un máximo de 2.200 marines y 17 aeronaves, aunque nunca se alcanzaron esas cifras.

Prueba de las buenas relaciones entre EEUU y España fue la visita que hizo el secretario de Defensa, Ashton Carter, a la base de Morón en el año 2015. El jefe del Pentágono y su homólogo español, entonces Pedro Morenés, presenciaron una serie de maniobras conjuntas realizadas por los militares españoles y estadounidenses. Entre ellas, había un abastecimiento de aviones en vuelo o un despliegue de los marines desde uno de los Osprey, una aeronave que como principal característica tiene que despega y aterriza en vertical.

Abastecimiento en pleno vuelo de aviones norteamericanos sobre la base de Morón.

Ahora, ocho años y medio después, el Pentágono ha decidido cambiar de base de referencia para sus misiones en África. Las operaciones en este continente se coordinarán desde Vicenza, en el norte de Italia. Esto supondrá la salida de los seis Osprey y de dos Super Hércules, que son aviones de transporte militar. La operación de traslado ya ha comenzado y está previsto que se culmine a finales de este mes.

Los trabajadores españoles que prestan servicios a las Fuerzas Aéreas de EEUU en Morón aseguran que están tranquilos y que esta mudanza no tiene por qué tener ningún impacto en ellos. Así se mostró José Armando Rodríguez Ardila, presidente del comité de empresa de KBR, la compañía que desempeña labores de ingeniería civil, apoyo logístico, salud e higiene industrial para el Ejército americano en la base. 

Este representante de los trabajadores explicó que en el año 2013, cuando hubo un aumento de la presencia militar de EEUU en la base, no hubo más contrataciones, por lo que ahora tampoco debería haber ningún recorte de plantilla ni otras medidas. "Estamos tranquilos", apuntó el presidente del comité.