-Llegó a la Alcaldía destacando su cualificación como alto funcionario del Estado, su experiencia en la Administración y, en política, como asesor. ¿Qué ha pasado para que pueda perder la Alcaldía en tan poco tiempo?

-He gobernado por ser de la lista más votada, pero la oposición nos ha puesto palos en las ruedas.

-Ellos hablan de "inacción".

-Dicen que no hemos cumplido el programa, pero se necesitan cuatro años y margen para trabajar. Le pongo varios ejemplos de las dificultades que hemos tenido: el anterior gobierno, de siete ediles, tenía tres liberados y el alcalde era vicepresidente en una sociedad en la Diputación, se suponía que estaba en los dos sitios a la vez, pero a nosotros nos negaron liberar a una persona y en el último cuatrimestre la secretaria accidental y su suplente han estado de baja. Y el gran problema del Ayuntamiento de Constantina es también que no tiene organización administrativa y los ayuntamientos deben estar preparados para funcionar con los funcionarios, los políticos están para otra cosa. En este agobio de personal, tenía un barrendero que es ingeniero de montes que me dijo estar dispuesto a colaborar como tal con la condición de no cobrar ni una peseta más y amenazaron que me denunciarían por prevaricador. Creo que eso es altruismo. Tampoco me aprobaron el presupuesto, pese a que es casi lo mismo del año anterior.

-La oposición también alude a que paró el PGOU, que no ha abierto la piscina cubierta...

-El PSOE estuvo ocho años con el PGOU que no era el que nosotros queríamos y contratamos por urgencia a una arquitecta para que nos asesorara. Porque, por ejemplo, ahora no hay suelo disponible para tres superficies comerciales que se quieren instalar y que representarían 50 puestos de trabajo. El anterior gobierno también construyó por más de un millón una piscina de difícil viabilidad, tenían un plan para abrirla con una aportación anual de 120.000 euros del Ayuntamiento. Mi intención no es dejarla como esos aeropuertos sin aviones, pero tengo estudios que dicen que se puede hacer con una aportación de 53.000 euros de fondos públicos. No sé de dónde saca el ex alcalde que con esa cantidad el agua estaría fría y los mayores no podrían bañarse.

-¿Intentaron llegar a acuerdos?

-Lo hemos intentado. Pero el otro día venía en El País un artículo en pro del diálogo, de Fernando Savater, en el que, citando a Montaigne, decía que había que dialogar, pero es difícil hacerlo con los tontos. Intenté hablar con el portavoz andalucista y le dije que si le parecía justo no dejar que liberemos a un edil y me contestó que ya teníamos tres, porque considera liberados a los tres jubilados, dos profesores y yo, que vivimos de nuestra pensión. Hace poco le dije también que íbamos a instar a la Junta a declarar Bien de Interés Cultural los Pozos de la Nieve, un establecimiento que alberga los pozos donde se recogía la nieve para traerla al Alcázar en el siglo XVI, y dijo que me apoyaría si hacía lo mismo con todas las casas rurales. Eso es no entender nada. Cuando hemos pretendido negociar con el PSOE, su portavoz me pidió que, para empezar, que volviera a poner al personal de confianza que él me diga...

-Ambos partidos se han alternado en el gobierno hasta que llegó Ciudadanos por Constantina.

-Las luchas han sido a muerte, como alcalde he tenido que pagar facturas de los abogados por las querellas que se interpusieron y he recordado la frase de Fraga: "La política hace extraños compañeros de cama". El acuerdo no persigue el bienestar o el interés general de Constantina, sino el de algunas personas. No soy un dogmático de la titulitis, pero en el gobierno de Cazalla todos tienen titulación superior y en el mío también, en el que pretende gobernar Constantina no hay ni uno. Es llamativo. Me resulta tremendamente doloroso que el nombre del PA, tan querido para mí, esté siendo enfangado en esto. Yo fui fundador, asesor parlamentario en las Cortes y director del área de Cultura en el Ayuntamiento de Sevilla con Alejandro Rojas-Marcos y Enriqueta Vila de delegada. En cuanto al PSOE, he trabajado muy a gusto con los alcaldes de la comarca y me han dicho que con esta moción de censura pierde la Sierra Norte. Pero el PSOE de Constantina tiene poco que ver con lo que propugna el partido: debería haber aumentado los impuestos a los ricos y resulta que la contribución rústica, con las fincas de gran valor que hay, no se ha modificado en estos años y supone un ingreso de 43.000 euros al año cuando por el urbano, el de todas las personas, se ingresan 800.000.

-¿Han presentado el escrito que anunciaron para intentar parar la moción o ir al contencioso?

-Lo haremos mañana (por hoy) que está el secretario, el escrito podrá tener dos vías, según los argumentos que aportamos y que deberían llevar a la paralicación de la moción o, al menos, a la suspensión del pleno para debatirla. Un constitucionalista, un abogado del Estado y un letrado del Parlamento me han asesorado y fue un miembro del PA el que me llevó el texto del artículo 197 que regula la moción de censura. La verdadera edil del PA, con la que he discrepado en otras cosas, ha manifiesto que se ha hecho a sus espaldas.

-¿Qué le gustaría que ocurriera?

-Yo quisiera que estas reflexiones llevaran a los grupos que han presentado la moción a reconsiderarla y si lo hacen, les pido que participen en el Ayuntamiento con el ánimo de conseguir el progreso de Constantina y sus vecinos. Si no, prefiero que sigan adelante porque nuestra labor en la oposición, sin el desgaste en el trabajo diario, será más eficaz. Con 74 años, soy el alcalde más veterano de Sevilla y no voy a a renunciar a mi acta, prometo servir a Constantina en la oposición los cuatro años.