Un hombre de 33 años resultó ayer herido grave al recibir un disparo a bocajarro en el estómago en una venta de la carretera A-92, situada en el término municipal de Paradas. Los hechos ocurrieron a las ocho de la tarde, cuando el herido entró en la venta Nueva Andalucía, ubicada en el kilómetro 44 de la autovía Sevilla-Málaga, pidiendo auxilio porque había recibido un disparo en la barriga, según informaron ayer fuentes del servicio de emergencias 112 y de la Guardia Civil.

Según algunos testigos presenciales, un hombre se habría bajado de un coche y disparado un arma de fuego contra otro. La víctima fue atendida en la misma venta por una ambulancia del servicio de emergencias sanitarias del 061, que lo estabilizó. Después, fue trasladada al Hospital Virgen de Valme, donde ingresó en estado grave. Se trata de un hombre de 33 años vecino de Utrera. El equipo de la Policía Judicial de la Guardia Civil de Marchena se ha hecho cargo de la investigación. Los agentes trabajan ahora en la búsqueda e identificación del autor del disparo, que podría haber sido efectuado a bocajarro y con una escopeta con los cañones recortados.

Según las primeras informaciones aportadas por los testigos, el agresor podría haber huido en el coche del que se había bajado antes de dispararle a la víctima. En el vehículo podrían ir al menos otras dos personas. Tras salir de la venta, el coche de los fugados se dirigió por la A-92 en dirección Málaga. Los agentes del instituto armado establecieron un dispositivo de búsqueda en la autovía y sus alrededores por toda la comarca, si bien a la hora de cierre de esta edición no había sido detenida ninguna persona relacionada con el tiroteo.

Aunque todavía no se conocen demasiados detalles de lo ocurrido, y los agentes están a la espera de que se le pueda tomar declaración a la víctima en el hospital, la investigación se encamina a que el móvil del tiroteo pudo ser un ajuste de cuentas relacionado con las peleas de gallos. En las próximas horas, la Guardia Civil tomará también declaración a las personas que estaban en la venta para tratar de identificar al autor de los disparos.