Una torre-nido combate desde la mañana de este lunes el virus del Nilo en Coria del Río. Después de más de un año de arduo trabajo, sus creadores, Diego Alves y Ángeles Mora, finalmente pudieron ver su proyecto hecho realidad. Esta torre, la primera de su tipo en España, tiene una capacidad para albergar más de 300 nidos de aves como vencejos, estorninos y gorriones.

El objetivo principal de esta torre-nido es fomentar la presencia de estas aves insectívoras en la zona. Estos pájaros se alimentan de mosquitos, que son los principales portadores del virus del Nilo. Al aumentar la población de estas aves en el área, se espera reducir significativamente la presencia de mosquitos y, por lo tanto, el riesgo de transmisión del virus.

Cómo es una torre de biodiversidad. Fuente: elaboración propia.

La torre en sí es una estructura que ha sido cuidadosamente diseñada para atraer a las aves. Su altura, con más de 12 metros, es propicia para que las aves la utilicen para construir sus nidos de forma natural. Además, se han utilizado materiales respetuosos con el medio ambiente para su construcción, lo que garantiza un entorno seguro y sostenible para las aves.

Iván Casero Montes, Francisco Jamardo, Juan Manuel Cordero, Ángeles Mora, Diego Alves, Modesto González, Moisés Cordero y Victoriano Cancelo.

Durante el acto de instalación, los vecinos de Coria se mostraron entusiasmados con los resultados que esta torre-nido podría traer. Las autoridades locales han elogiado la iniciativa, reconociendo el impacto positivo que puede tener en la prevención del virus del Nilo en el municipio.

Ahora todo queda en manos de la naturaleza y de las aves que elegirán habitar esta nueva torre-nido. Con su presencia y actividad frenética en busca de insectos, se espera que el equilibrio ecológico de la zona se vea fortalecido y que los mosquitos, y con ellos el virus del Nilo, se conviertan en una amenaza mucho menor para los habitantes de Coria y sus alrededores.

Entorno de la torre de la biodiversidad. Fuente: elaboración propia

El proyecto de Diego Alves y Ángeles Mora no solo destaca por su innovación y enfoque ecológico, sino también por su compromiso con la protección de la salud de sus habitantes. Sin duda, esta torre de la biodiversidad se convierte en un símbolo de esperanza y una valiosa herramienta en la lucha contra el virus del Nilo en Coria. También supondrá un refugio para 300 murciélagos.

"La torre es una apuesta por la biodiversidad y por intentar cambiar el rumbo en torno a la concepción del medio ambiente y el entorno urbano, donde tenemos que pasar la mayor parte de nuestras vidas. Tenemos que virar en un sentido mucho más saludable no solamente en el ámbito medioambiental, sino también en el de la salud, valga la redundancia", apuntó este lunes el alcalde de Coria, Modesto González.

El regidor recordó que en Coria han sufrido "muy de cerca las consecuencias del virus del Nilo, que no es más que un efecto más del cambio climático y cómo cambian las condiciones de la biodiversidad en todo el mundo". "Tenemos que poner medios fundamentados en la naturaleza. La química tiene muy corto recorrido, porque si la prolongamos en su uso acabamos con el entorno. Esta torre de la biodiversidad va dirigida a ser un referente en lo que tiene que ser la concepción del hábitat y el entorno urbano de ahora en adelante", concluyó el alcalde coriano.