La semana del cierre del mercado en la Premier se antoja decisiva para definir la hoja de ruta final de la planificación del Betis que sigue pendiente del futuro de Giovani Lo Celso y que tiene en Borja Iglesias al deseado delantero. El jueves por la tarde finaliza el plazo de fichajes en Inglaterra, un día antes del comienzo de la competición, y en el Betis se aguarda al Tottenham, el equipo que más en firme se ha interesado por el argentino.

El conjunto inglés lleva meses detrás de Lo Celso, pero las altas exigencias verdiblancas, al tasar inicialmente al zurdo en 75 millones de euros, bloquearon la operación. Con el paso de las semanas y tras comprobar que ningún otro equipo se acercaba a esa pretendida cifra, el Betis ha tensado la cuerda tras la última propuesta del Tottenham, cifrada en 52 millones de euros y con ocho más en variables.

Aunque la propuesta ya sí entra dentro del valor de mercado de Lo Celso, el Betis quiere que el conjunto inglés realice un último esfuerzo para satisfacer a Mauricio Pochettino, el gran valedor del argentino. Desde Inglaterra, con Daniel Levy como duro negociador, se transmite que esa oferta será la última que realice el Tottenham, que comenzó ofreciendo 40 millones. Además, el dirigente de los Spurs también está inmerso en otras operaciones de calado como las posibles incorporaciones de Bruno Fernandes, el centrocampista del Sporting de Portugal, y Ryan Sessegnon, el banda izquierda del Fulham, o el traspaso de Christian Eriksen, el centrocampista danés que acaba su contrato en 2020 y que se ha mostrado reacio a negociar una renovación.

Con este panorama, el futuro de Lo Celso debe despejarse en las próximas horas. Con el rostro serio, y acompañado por Sidnei y Emerson, el argentino abandonó ayer la ciudad deportiva pasada la una y media de la tarde, después de que regresara con el equipo desde Casablanca, donde viajó pero se quedó sin disputar minuto alguno.

Las múltiples aristas del contrato de Lo Celso, con porcentajes en caso de venta para el PSG (20% de la plusvalía), Rosario Central (3%) y otra cantidad para el agente y el propio jugador, provocan que la negociación final no sea sencilla para que al Betis le cuadren los números previstos en su hoja de ruta.

Borja Iglesias celebra un gol con el Espanyol.

Tras el traspaso de Júnior y la disponibilidad de esos 18 millones de euros, y a la espera de lo que suceda con Lo Celso y Camarasa, el Betis quiere avanzar definitivamente por Borja Iglesias, ante el deseo de Rubi de contar cuanto antes con el delantero. "Estamos esperando a que, si el Betis quiere algo, nos lo diga. Fijamos unas condiciones de pago y de ahí no nos hemos movido. La pelota está en el otro lado. Cuando las cosas sean buenas para las tres partes se llegará a un acuerdo. Mientras no sea así, todo está parado", aseguró ayer el vicepresidente del Espanyol, Carlos García Pont, cuando le cuestionaron por la situación de las negociaciones con el Betis.

Con el acuerdo con Borja Iglesias pactado desde hace semanas, el Betis está a la espera de reunir el dinero necesario para acometer la operación, aunque siempre sin comprometer otras operaciones que quiere abordar en este mercado. Además del delantero, los técnicos consideran imprescindible la llegada de un lateral izquierdo que cubra la baja de Júnior y que sea competencia para Pedraza.

La inyección económica que supondría la venta de Lo Celso permitiría al Betis afrontar la recta final del mercado con disponibilidad para acometer la llegada de ese lateral y también cualquier otra opción que se pusiera a tiro antes del 2 de septiembre.