La derrota (2-3) del Betis ante el Villarreal, el domingo pasado, confirmó una realidad desde hace ya un tiempo en Heliópolis y es que el Benito Villamarín ha dejado de ser un fortín. Lo que antes era una fortaleza verdiblanca ahora los equipos que visitan el recinto de La Palmera se marchan casi siempre con puntos en el casillero, como reflejan los números.

Y es que hay un punto de inflexión en la trayectoria del cuadro de Manuel Pellegrini esta temporada jugando al calor de su público, y fue el partido ante Las Palmas, que acabó con triunfo bético (1-0, el 26 de noviembre de 2023). Hasta ahí, de los 9 partidos jugados de local (contando Liga y Liga Europa), los verdiblancos habían conseguido 7 victorias (1-0 frente al Rayo, 3-0 al Valencia, 2-1 al Sparta de Praga, 2-1 ante Osasuna, 2-0 al Mallorca, 4-1 al Aris Limassol y el citado anteriormente, el 1-0 frente a Las Palmas) y 2 empates (0-0 ante el Atlético de Madrid y un 1-1 frente al Cádiz).

Sin embargo, tras ese encuentro ante los canarios, la línea del Betis en casa empezó a descender. Desde entonces y hasta este último domingo, ha jugado el conjunto heliopolitano 10 encuentros en su campo con un bagaje muy diferente: 2 triunfos (1-0 al Granada y 3-1 ante el Athletic); 4 empates (1-1 ante el Real Madrid, otro 1-1 frente al Girona, idéntico resultado ante el Getafe y un 0-0 ante el Alavés); y 4 derrotas (2-3 frente al Rangers, 2-4 ante el Barcelona, 0-1 ante el Dinamo de Zagreb y el 2-3 ante el Villarreal).

Una pérdida de fiabilidad que ha repercutido también en la clasificación liguera con la pérdida de la sexta plaza, estando la Real Sociedad ahora un punto por encima de un Betis que de las diez jornadas que restan para que concluya el campeonato jugará cuatro veces en el Benito Villamarín (Celta de Vigo, Sevilla, Almería y Real Sociedad), mientras que disputará seis a domicilio (Rayo Vallecano, Girona, Valencia, Osasuna, Las Palmas y Real Madrid).

En este esprint final de temporada, donde el Betis se juega el objetivo de volver a disputar competición europea, cada partido vale su peso en oro y el factor Heliópolis va a desempeñar un papel muy importante. Y más, después del revés encajado ante los de Marcelino García Toral. Por ello, los de Pellegrini, que ahora tienen dos salidas muy importantes a Vallecas y Montilivi, deben hacer autocrítica para que regresen las victorias antes de volver a jugar como local con la meta de empezar a despejar la siguiente incógnita: ¿Volverá el Villamarín a ser un fortín?