La pandemia trastocó nuestras vidas hace ya más de un año. Nuestros hábitos y rutinas diarios se vieron afectados y, en muchos casos, totalmente modificados. De este modo, la pandemia ha influido incluso en la calidad de nuestros descanso, modificando con ella incluso lo que soñamos cada noche.

Según la BBC, la pandemia habría causado estragos incluso en la manera y el contenido de lo que soñamos cuando cerarmos los ojos. Eso podría tener su explicación en la cantidad de información recibida y en el estrés generado por toda la situación actual. Todo esto ocasiona que nuestro cerebro colapse y sienta una pesada sensación de agobio constante.

Esto influye en nuestros sueños, en las imágenes que vemos en ellos y en nuestras sensaciones. En el estudio realizado por el medio, y tras un año de pandemia, se ha testado a varias personas para saber si con la llegada de una nueva calma, ocasionada por el creciente número de vacunados e inmunizados, también los sueños han vuelto a su estado de siempre.

Los sueños tienen un componente negativo

Los lectores de la BBC mandaron sus sueños más repetidos al citado medio. Una de ellas es Fiona Ramage, ciudadana escocesa de Dundee, que declaraba soñar que andaba por una playa llena de tiburones al mismo tiempo que se preguntaba por qué la gente no guardaba la distancia social necesaria. 

Pero a todos los grupos de edades nos ha afectado la pandemia en mayor o menos medida. Sayaka, otra lectora que se mudó recientemente al Reino Unido desde Japón, cuenta que su hija pequeña de siete años cuenta a menudo que sus sueños están relacionados con el Covid-19. Concretamente, la pequeña sueña con quedarse en casa mientras que sus padres llevan mascarilla y se lavan las manos con frecuencia. En los sueños de Mariela Cortés, lectora de Santiago de Chile, hasta los animales como los gatos y los perros deben llevar mascarilla. 

Los científicos llevan investigando el tema de los sueños desde hace varios meses. Una de ellos es Deirdre Barrett, psicóloga de la Facultad de Medicina de Harvard, la cual ha conseguido reunir alrededor de 15.000 sueños de diferentes personas. De estos, dos tercios pertenecían a mujeres. 

Sus resultados han sido publicados en un libro, Pandemic Dreams, y se encuentra ubicado durnte la primera ola de la pandemia, la más dura de todas las vividas hasta ahora. Para Barrett, en esta ola la mayoría de las personas soñaban con ataques de insectos o que no podían respirar. Estos variaron durante el confinamiento, transformándose en imágenes de cárceles o exámenes sorpresas.

Tras seis meses de estudio, la psicóloga sí descubrió que el sueño más repetido entre las personas era olvidarse de ponerse la mascarilla o, incluso, encontrarse rodeadas de personas sin ella. Otro de los más repetidos con la llegada de las vacunas y el inicio de las campañas de vacunación son los que incluyen imágenes negativas de estas. Dentro de estos, por ejemplo, se encuentra el darse cuenta a la hora de recibir la vacuna que esta en realidad es de cianuro.

La investigación de la doctora Barret revela que hasta el 90 % de los sueños relacionados con la pandemia son negativos. De igual manera, la especialista ha querido recalcar que incluso dentro de varios años seguiremos teniendo reflejos en nuestros sueños de esta pandemia.