Una doctora revela por qué tenemos antojo de chocolate durante la menstruación y qué podemos comer para disminuirlo

Durante los días previos y durante la menstruación, muchas mujeres experimentan una serie de síntomas tanto físicos como emocionales que afectan a su rutina diaria. Uno de los más comunes y curiosos es el antojo de dulce, especialmente, de chocolate. Este deseo aparentemente incontrolable de consumirlo no es solo una cuestión de gusto o de costumbre, sino que tiene explicaciones fisiológicas y emocionales que lo justifican. Las hormonas, el estado de ánimo y las necesidades nutricionales juegan un papel fundamental en este fenómeno que, lejos de ser un capricho, puede estar diciéndonos algo importante sobre nuestro cuerpo.

Además de los antojos, la menstruación puede venir acompañada de dolor abdominal, fatiga, irritabilidad y cambios de humor. En este contexto, la alimentación puede ser una gran aliada no solo para aliviar estos síntomas, sino también para equilibrar los niveles de nutrientes que se ven afectados por los cambios hormonales. Existen combinaciones de alimentos ricos en triptófano y magnesio que pueden ayudar a mejorar el estado de ánimo, reducir el dolor y aportar energía. Estos nutrientes están directamente relacionados con la producción de serotonina y la relajación muscular, dos aspectos esenciales para transitar el ciclo menstrual de forma más llevadera.

El deseo de chocolate y su explicación biológica y emocional

El cuerpo humano responde a la menstruación con una serie de ajustes hormonales complejos. Los niveles de estrógeno y progesterona varían de forma notable, lo que repercute directamente en neurotransmisores como la serotonina, una sustancia química responsable de regular el estado de ánimo. Cuando la serotonina baja, es común sentirse más irritable, ansiosa o triste. En respuesta, el cuerpo tiende a buscar alimentos que puedan generar una sensación de placer y bienestar, y el chocolate es uno de los más eficaces en ese sentido. Sin embargo, según la doctora Sara Marín Berbell (@uncafecontudoctora), "lo que realmente tenemos es antojo de triptófano y magnesio".

El chocolate, especialmente el negro y el que contiene un alto porcentaje de cacao, tiene propiedades que estimulan la liberación de endorfinas y dopamina, neurotransmisores relacionados con la felicidad y la satisfacción. Además, contiene pequeñas cantidades de triptófano, un aminoácido esencial que participa en la producción de serotonina, por lo que "es necesario tomar triptófano".

Otro factor que influye en el deseo de chocolate es la necesidad de magnesio ya que "ayuda en esa transformación". Este mineral es fundamental para relajar los músculos, aliviar calambres y reducir la ansiedad, pero durante la menstruación los niveles pueden disminuir. El cuerpo, en su sabiduría, tiende a buscar alimentos ricos en este mineral para compensar esa carencia y el chocolate negro es una fuente rica en magnesio. De ahí que muchas personas sientan una necesidad real, y no solo emocional, de consumirlo en estos días. Pero para evitar comernos la tableta de chocolate entera, hay alternativas saludables que nos ayudan a compensar esa carencia de magnesio y triptófano.

Combinaciones nutritivas para aliviar el dolor y mejorar el bienestar menstrual

Aunque el chocolate puede ser útil y reconfortante, hay otras combinaciones de alimentos que pueden ofrecer beneficios similares o incluso superiores gracias a su riqueza en triptófano y magnesio. Estos nutrientes ayudan no solo a mejorar el estado de ánimo, sino también a relajar el cuerpo y aliviar el dolor menstrual de forma natural.

Un ejemplo delicioso y equilibrado que nos da la doctora Sara Marín es la mezcla de plátano, cacao puro, nueces y yogur. El plátano es una excelente fuente de triptófano y potasio, que ayuda a prevenir calambres. El cacao puro aporta magnesio y antioxidantes, mientras que las nueces contribuyen con grasas saludables y más magnesio. El yogur, además de ser rico en calcio, favorece la flora intestinal y puede ayudar a mejorar la digestión durante estos días, cuando suele alterarse.

Otra opción muy nutritiva es un plato que incluya espinacas, semillas de calabaza, huevo y salmón. Las espinacas están cargadas de hierro, magnesio y fibra; las semillas de calabaza son una fuente vegetal muy completa de triptófano y ácidos grasos esenciales; el huevo proporciona proteínas de alta calidad y colina, y el salmón añade omega 3, un antiinflamatorio natural que puede reducir la intensidad del dolor menstrual. Esta combinación no solo aporta energía y saciedad, sino que también contribuye a estabilizar el estado de ánimo.

Una alternativa más ligera pero igualmente efectiva es una tostada integral con aguacate y almendras. El pan integral proporciona carbohidratos complejos que ayudan a regular los niveles de azúcar en sangre, el aguacate es rico en grasas saludables, y las almendras son una fuente excelente de magnesio, vitamina E y fibra. Este tipo de merienda o desayuno puede ser ideal para mantener la energía estable y sentirse reconfortada sin caer en alimentos ultraprocesados.

Tener antojo de chocolate durante la menstruación no es un simple capricho sino que responde a procesos hormonales, emocionales y nutricionales que forman parte del ciclo menstrual. El cuerpo busca equilibrar su química interna, aliviar tensiones y reponer nutrientes que se ven afectados en estos días. Aunque el chocolate puede ser un buen aliado si se consume con moderación y en su forma más pura, existen otras opciones alimenticias que combinan triptófano y magnesio de forma natural, ayudando no solo a calmar los síntomas físicos, sino también a mejorar el estado de ánimo y aportar energía.