La postura ideal a la hora de dormir para combatir el calor y descansar mejor

Temperaturas que no bajan de los 25º en las ciudades de interior, la humedad haciendo estragos en las zonas costeras y media España sufriendo lo indecible para conciliar el sueño en los últimos días. Este última ola de calor del mes de agosto, que dará paso el domingo a un desplome de las temperaturas, está causando estragos en la gente. Por las noches no se encuentra el momento para acostarse y una vez que uno se aventura a intentar invocar a Morfeo el sudor se apodera de tu cuerpo y resulta harto complicado romper esa barrera que te sitúe en el sueño profundo. Pasan las horas y la desesperación invade la habitación. Es momento de echar mano de los trucos que pueden ayudar a dormir en las noches de más calor. El ventilador, enfriar determinadas zonas del cuerpo como las muñecas, la nuca o las sienes o directamente recurrir a la ducha de agua fría. Pero igual o más importante es saber cómo dormir. Esta es la postura ideal a la hora de dormir para combatir el calor y descansar mejor.

Uno de las pruebas evidentes de que no estamos durmiendo como debiéramos es dar continuamente vueltas buscando la mayor comodidad posible dentro de la situación extrema que estamos viviendo (el umbral de temperatura para conciliar el sueño se sitúa en los 21º-22º). En esos momentos nos sobran las sábanas, el pijama o cualquier cosa que se entrometa entre nosotros y el sueño. La postura a la hora de dormir también puede ayudarnos a estar más frescos, según la neurociencia.

La respuesta está en el proceso de transpiración del cuerpo. Ante el calor extremo es inevitable sudar y dicho sudor termina evaporándose, consiguiendo descender la temperatura del cuerpo que se relaja hasta terminar durmiéndose.

Evitar el aire acondicionado de noche

Pues bien, si dormimos boca arriba o boca abajo, casi la mitad de nuestro cuerpo estará en contacto con la superficie de la cama y no podrá realizar la transpiración. En cambio, si estamos de lado, maximizamos la superficie de piel expuesta al aire y puede transpirar mejor. Es por ello que ante semanas como ésta en la que el calor nocturno se ha instalado en toda la geografía española la solución pasa por dormir de costado, en la que se conocer como posición decúbito lateral. Esta postura no sólo conseguirá que el cuerpo transpire mejor, sino que evitará los dolores de cuello y espalda, hará que nuestra respiración mejore y que la convivencia en la cama sea más llevadera por la ausencia de ronquidos.

Y todo sin necesidad de recurrir al aire acondicionado (en caso de disponer de él), ya que, si bien es de uso obligado durante el día cuando el sol apunta con fuerza a nuestros hogares, por la noche no es recomendable, ni para la salud ni para la economía familiar.