Sonia Díaz Rois, experta en gestión de la ira y autora del libro 'Y si me enfado, ¿qué?'
Esta experta en gestión de la ira nos explica cómo sobrevivir a la cena navideña sin caer en el efecto 'cuñading'
Históricamente, cuando la gente habla de adicción, habla de drogas. Ahora se sabe que un elemento básico de todos los trastornos adictivos es la falta de control, es decir, la persona afectada pierde el control sobre un comportamiento que inicialmente es placentero pero luego se adueña de sus deseos hasta dominar sus acciones. Impulsos que provocan serios problemas a nivel individual y familiar. En este contexto, el nacimiento de las nuevas tecnologías y su fácil acceso desde edades tempranas, está provocando una oleada de adicción a ellas y a otras actividades no relacionadas con las drogas , especialmente entre los jóvenes. Esto se ha convertido en un verdadero problema para miles de jóvenes y sus familias, llegando incluso a provocar graves trastornos mentales.graves trastornos mentales. Los 'yonquis' a las tecnologías y a otras prácticas que las mismas facilitan, suman millones de casos en el mundo, algunos no conscientes de ello debido a que vivimos en un ecosistema digital integrado de pleno en la sociedad. En este sentido, la ONG Protégeles, que colabora con la Comisión Europea, señala que en España el 1,5% de los ciudadanos ya es adicto a las nuevas tecnologías, y el 21% de los jóvenes está en riesgos de 'engancharse' al móvil y desarrollar fobia a estar sin su terminal.
De hecho, artistas aclamadas como Selena Gómez han confesado ser tratados a nivel psicológico de esta adicción. La propia actriz y cantante declaró que alejarse de las redes le salvó la vida. Buscando una solución a estos casos, el Hospital Gregorio Marañón ha estrenado AdCom, un centro para tratar adicciones comportamentales de esta nueva era como el juego de apuestas, videojuegos, sexo, compras compulsivas y redes sociales, todo ello desde una perspectiva sanitaria y psicosocial.
Según indicaron en la presentación de esta nueva unidad, el tratamiento se brindará a dos grupos poblacionales de forma diferenciada: los menores de 12 a 17 años de edad, acompañados de sus padres o tutores; y adultos mayores de 18 años. Dentro de estas adicciones, se tratan 5 con esferas diferentes: el trastorno por juego de apuestas, el trastorno por adicción a los videojuegos, por adicción a las redes sociales, al sexo y a la compra. Las más problemáticas y frecuentes entre jóvenes recaen en los videojuegos y las redes, pero más del 75% en la primera de ellas.
En cuanto al acceso a este nuevo servicio, desde el pasado mes de julio ya se puede pedir cita a través del siguiente enlace: https://citawebadcom.sanidadmadrid.org/Acceso/Servicio.aspx. De esta forma, los podrán acceder al programa sin necesidad de pasar por su médico de Atención Primaria ni su centro de Salud Mental.
Después, una vez citados, el proceso de cribado se realizará en el Hospital público Gregorio Marañón, cumplimentando unos cuestionarios para delimitar su grado de adicción y afectación psicológica o psiquiátrica. Los adultos podrán rellenarlos a través de su Tarjeta Sanitaria Virtual o una tablet que proporcionará el propio hospital, al igual que en el caso de los menores y sus padres. Por este dispositivo pueden pasar unas 100 personas a la semana.
Si los expertos detectan que existe un uso problemático, pero no existe adicción, se deriva a dispositivos donde la persona recibirá información y formación para el buen uso de esas conductas; si no existe adicción ni uso problemático, se le comunica, pero no se le dará cita", detalló el Gobierno regional en un comunicado.
La terapia está dirigida por profesionales del Instituto de Psiquiatría y Salud Mental del Hospital Gregorio Marañón, integrado por un psiquiatra de adultos, uno de niños y adolescentes, un psicólogo experto en adicciones, una enfermera especialista en salud mental y un trabajador social.
La finalidad de este equipo multidisciplinar es atender de forma simultánea la adicción y el trastorno mental, "lo que se conoce como una patología dual", explicó el consejero de Sanidad, Enrique Ruiz Escudero, remarcando sus tres objetivos claros: "La prevención, la investigación y la asistencia en el campo de la Salud Mental en general y en las Adicciones Comportamentales en particular", expuso.
Según comenta a 20minutos, Francisco Ferre Navarrete, jefe del Servicio de Psiquiatría del Adulto en el Hospital General Universitario Gregorio Marañón y un gurú en el tratamiento de este tipo de adicciones, la fase de cribado puede dar tres resultados diferentes: "una, que no tenga absolutamente nada, aunque sienta que está desplegando esa conducta más de lo que sería necesario; la segunda, que no tenga una adicción pero esté en un franco riesgo de pasar a ser un adicto (en este caso, le recomendaremos que vaya a talleres de prevención y de psicoeducación); y en tercer lugar, que el paciente sí tenga una adicción, se le cite en el centro y comience un proceso de evaluación''.
Si el paciente es valorado como "adicto", comienza con una visita a la Enfermería que le realizará los análisis de sangre indicados en esta evaluación y le explicará el procedimiento de su tratamiento. Luego lo examinará un psiquiatra, después un psicólogo, y dependiendo de sus carencias no sanitarias se programará una cita con un trabajador social.
Desde la primera valoración, los pacientes reciben un plan de tratamiento individualizado que incluye observación, psicoterapia y tratamiento psiquiátrico individual y/o grupal. Las intervenciones grupales están diseñadas para brindar a los pacientes un mejor control desde la empatía y el conocimiento de otras experiencias similares. Esto tiene un impacto positivo en el control de los impulsos relacionados con la adicción.
Con todo ello, se pretende frenar la impulsividad, la falta de autocontrol sobre ese estímulo, aprender a usarlo de manera lúdica sin que esto suponga un conflicto o le genere otro tipo de trastornos y perjuicios mentales. La eliminación es un error, según comentan, lo mejor es enseñar a estos adictos a dominarlas y darles un espacio limitado en sus vidas.
En este tipo de trastornos es importante saber reconocer señales que indican una adicción con todos sus componentes, diferenciándolas de otros estadíos que solo se catalogan como un mal uso. Según estos profesionales, existen matices que los diferencian de otros 'malos hábitos'. Entre ellos se encuentran:
También te puede interesar
Sonia Díaz Rois, experta en gestión de la ira y autora del libro 'Y si me enfado, ¿qué?'
Esta experta en gestión de la ira nos explica cómo sobrevivir a la cena navideña sin caer en el efecto 'cuñading'
Investigación y Tecnología
Ni dieta mediterránea, ni detox: este es el tipo de alimentación que consigue acabar con la obesidad
Investigación y Tecnología
Cómo entrenar el cuerpo para mejorar el tránsito intestinal
Contenido patrocinado
Contenido ofrecido por Philip Morris Spain