El skyr es un producto lácteo islandés aunque su procedencia exacta no es del todo clara, es parecido al yogur, pero con una textura más espesa, cremosa y de sabor suave, lo que cabría pensar que se parece al yogur griego. Sin embargo, es más ácido de sabor y no es exactamente un yogur, sino un queso. Se elabora a partir de leche desnatada y se le agrega cultivos de bacterias lácticas para fermentar. Luego, se filtra para eliminar el suero, lo que le confiere su consistencia cremosa y densa.

El skyr es conocido por ser rico en proteínas y bajo en grasas, lo que lo convierte en una opción saludable. A menudo se consume con frutas, granola o miel para darle sabor. Es una parte importante de la dieta islandesa y ha ganado popularidad en otros lugares debido a sus propiedades nutricionales.

Propiedades nutricionales

1. Alto contenido proteico: El skyr es conocido por ser una excelente fuente de proteínas, realmente contiene entre 11 y 15 gramos por cada 100. Las proteínas son esenciales para la construcción y la reparación de los tejidos, el mantenimiento de la masa muscular y la sensación de saciedad, lo que puede ser útil para el control del peso.

2. Bajo en grasas: El skyr generalmente se elabora con leche desnatada, lo que significa que tiene un contenido bajo en grasas, además de que no tiene aditivos, ni azúcares añadidos. Esto lo convierte en una opción más saludable para aquellos que buscan reducir la ingesta de grasas saturadas ya que contiene menos de 1 gramo de grasa por cada 100.

3. Rico en calcio: La leche, ingrediente principal del skyr, es una buena fuente de calcio ya que cuenta con unos 150 mg por cada 100 gramos y este elemento es esencial para la salud ósea y dental, así como también para la función muscular y nerviosa.

4. Probióticos: Al ser un producto fermentado, el skyr contiene bacterias probióticas beneficiosas para la salud intestinal las cuales ayudan a mantener un equilibrio saludable de la flora intestinal, mejorando la digestión y fortaleciendo el sistema inmunológico.

5. Aporte de vitaminas: Además de calcio, el skyr puede contener otras vitaminas y minerales presentes en la leche, como vitamina D, vitamina B12 y zinc.

Bajo en grasas, huesos fuertes y equilibra la flora intestinal

1. Es una alterativa para las personas con intolerancia a la lactosa ya que cuenta con la enzima lactasa para eliminar toda la lactosa presente, sin que por ello varíe el resto de la composición nutricional.

2. Probióticos para la salud intestinal: El proceso de fermentación del skyr implica la presencia de bacterias probióticas, las cuales aportan un equilibrio saludable de la flora intestinal. Esto puede mejorar la digestión y fortalecer el sistema inmunológico.

3. Mejora la tensión arterial alta: al igual que otros productos lácteos, el skyr contiene minerales como el potasio, el magnesio o el calcio, que son muy buenos para la tensión. De este modo, este superalimento ayuda a mantener un corazón sano y reduce el riesgo de sufrir enfermedades cardíacas. 

4. Bajo en grasas y azúcares: Optar por variedades de skyr sin aditivos ni azúcares añadidos puede ayudar a mantener una dieta equilibrada y controlar la ingesta de grasas saturadas y azúcares.

5. Un 10% de la composición nutricional del skyr son proteínas, lo que supone más del doble de lo que tiene un yogur natural. Las proteínas poseen un alto valor biológico gracias a que contienen aminoácidos.