Patrimonio aprueba la restauración del retablo de las Ánimas de la parroquia de San Bernardo

La obra cuenta con una pintura de Francisco de Herrera 'el Viejo', una de las más sobresalientes de su producción

Fue realizado en el año 1692 por Fernando Barahona, y resultó afectado durante los sucesos de 1936

Encarnación Hurtado realizará los nuevos ángeles pasionarios para el misterio de Montserrat

El retablo resultó especialmente dañado en los sucesos de 1936
El retablo resultó especialmente dañado en los sucesos de 1936

La Comisión Provincial de Patrimonio Histórico, presidida por la delegada territorial de Cultura y Deporte de la Junta, Carmen Ortiz, ha dado cuenta de un total de nueve expedientes de interés para la conservación del patrimonio cultural y artístico. De los temas examinados, cinco corresponden a Sevilla y cuatro a la provincia, concretamente a las localidades de Écija, Osuna, Las Cabezas de San Juan y Santiponce.

En concreto, dicha comisión ha aprobado el proyecto de restauración del retablo del Juicio Final o de las ánimas de la iglesia de San Bernardo de Sevilla y, en particular, la pintura que lo preside, obra de Francisco Herrera el Viejo. El retablo presenta un mal estado de conservación determinado, en buena medida, por los actos vandálicos del que fue objeto en 1936 y su posterior intervención tras la guerra. El plan de actuación, adecuado a las características del bien, es conforme con la práctica de la restauración en retablos de madera dorada y policromada similares, con decoración escultórica y pinturas al óleo sobre lienzo, siendo correcto en cuanto a criterios, materiales, técnicas y procedimientos.

El colosal retablo de Ánimas de la parroquia de San Bernardo
El colosal retablo de Ánimas de la parroquia de San Bernardo

El retablo del Juicio Final, neoclásico realizado a en el año 1692 por Fernando Barahona, sencillo con un solo cuerpo, gemelo con el que preside el Santísimo Cristo de la Salud. Está ocupado por una pintura de tamaño colosal realizada por Francisco de Herrera, el Viejo (1590-1656), en el año de 1628, para muchos la más grandiosa que brotó de sus fecundos pinceles, influenciada notablemente por la obra de Pacheco en su composición, donde aparece en la parte superior del lienzo Jesús glorioso, rodeado de la Virgen, los apóstoles y otros santos, para juzgar a la humanidad; en la parte inferior, el Arcángel San Miguel, con su espada de fuego, separa a los réprobos de los justos, donde los personajes representados parecen de bulto, por la gran pasta de color que tienen, y elogia la fuerza del claroscuro, y especialmente se señala el contraste de los condenados, que, llenos de confusión y dolor, van a ser precipitados en el infierno, con los bienaventurados, llenos de placer y gratitud. En ambos casos trata con gran vigorosidad las figuras de esta zona inferior, especialmente en los desnudos, lo cual le confiere una vitalidad expresiva con fuertes dotes de naturalismo, propio de la última época del manierismo.

Aunque el contrato entre la Hermandad y su autor no especificara nada de su hechura, se sabe que cobró por este cuadro 250 ducados de moneda de vellón. Se encuentra escoltada por dos columnas salomónicas de seis espiras. En los sucesos de 1936, el retablo no fue dañado, aunque el lienzo quedó separado en varios trozos, debiendo ser restaurado. En el ático, entre dos columnas similares a las anteriores y más pequeñas, se puede observar una escultura en madera policromada y estofada el Arcángel San Miguel.

Otros proyectos

Asimismo, ha informado favorablemente sobre el proyecto de conservación del Retablo de San Juan Bautista de la iglesia del Monasterio de Santa Paula de Sevilla, ya que la intervención es necesaria y ortodoxa en cuanto a su metodología y criterios de intervención y correcto y adecuado en sus propuestas de intervención. El retablo se encuentra en un mal estado de conservación global, con estructuras estables, pero con presencia de alteraciones en el soporte y estéticas que aconsejan una intervención integral de conservación y restauración. La obra requiere un control continuo y la corrección de los efectos acumulados por el paso del tiempo desde la intervención del año 89.

Por otro lado, ha autorizado la segunda fase de las obras de rehabilitación de la Iglesia de San Laureano y su adaptación como centro multifuncional y de información del Ayuntamiento de Sevilla al suponer una puesta en valor del elemento defensivo, que podrá contemplarse en sus dos caras, acompañando a la entrada del edificio y de manera continua. Por ello, la Comisión ha permitido el inicio de las obras descritas en el proyecto a excepción de la intervención en la Muralla, que deberá ser objeto de un proyecto de conservación completo en el que se indiquen de manera detallada la configuración del lienzo, patologías, técnicas y materiales a utilizar en este caso concreto, una vez se lleve a cabo el correspondiente seguimiento arqueológico que permita contar con mayor información acerca de su configuración y las patologías que presenta el BIC.

stats