Así suena la versión original de "Pasan los Campanilleros" por Tejera en el Rosario de San Vicente
La formación musical la ha interpretado tal y como la ideó Farfán por el centenario de su creación
La letra corresponde al coro de campanilleros de la Soledad de Castilleja de la Cuesta
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Un salto temporal de un siglo en cuestión de cinco minutos. Una recuperación histórica que jamás debió perderse. Una composición emblemática que revolucionó el género y que ha sido maltratada a lo largo de su existencia. Quienes anoche estuvieron en la calle Martínez Montañés acompañando a la Virgen del Rosario pudieron disfrutar de un instante quizás irrepetible: la interpretación original de la marcha Pasan los Campanilleros por parte de la Banda del Maestro Tejera.
Se trata de una iniciativa auspiciada por la propia cofradía con motivo del centenario de la marcha, que se cumple concretamente el ya cercano 2024 y para el que la hermandad ha preparado un amplio programa de actos que se conocerá próximamente. De este modo, y durante el discurrir de la imagen por la citada calle, la Banda de Tejera interpretó esta simpar composición según la trazó y concibió su autor, Manuel López Farfán. Esto es, cantada, tal y como hacían los músicos y nuestros antepasados hace ya un siglo. Durante la interpretación de la parte cantada, que corresponde a la archiconocida parte en que intervienen las campanillas, algún que otro cofrade se sumó al canto de los músicos creando una atmósfera imborrable.
La letra de la marcha, que pertenece al Coro de Nuestra Señora de la Soledad de Castilleja de la Cuesta, dice así: "En la cima del Monte Calvario orlada de nubes, brillaba una Cruz, y a sus pies, con el Santo Sudario, esperaba María un rayo de clara luz. Que luz era su Hijo Jesús, luz radiante que alumbró cielos y tierra y esparció en sus ascuas amor, caridad y virtud".
Una iniciativa, una idea, que no solo se hace justicia para con una marcha denostada e inmisericordemente transformada (en la Carrera Oficial estaba prohibida hasta 1995), sino que la revaloriza y la sitúa como lo que verdaderamente es: una de las marchas procesionales más completas y rotundas de la Semana Santa de Sevilla, en la que Farfán revolucionó el género a través de la fusión entre el folclore y sus sobresalientes conocimientos musicales. Por el momento, desde Tejera apuntan que estudiarán la permanencia (o no) de esta versión de manera definitiva en el repertorio de la formación.
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